Mesita para el reposabrazos del sofá: un proyecto sencillo y muy funcional

Medimos el ancho del reposabrazos del sofá con el metro y trasladamos la medida a la tabla de madera de pino. Con la sierra de calar, cortamos las piezas necesarias: base superior, laterales y refuerzos. Así nos aseguramos de que encaje perfectamente en el sofá.

Marcamos las esquinas donde irán los tornillos y, con una broca fina, perforamos los agujeros pasantes. Colocamos un mártir debajo para no dañar la mesa de trabajo.

Con una fresadora, realizamos un rebaje longitudinal en la parte superior de la tabla. Este canal servirá para apoyar cómodamente el móvil o la tablet mientras disfrutas del sofá.

Antes del montaje, pasamos la lijadora por toda la superficie y los cantos para eliminar astillas y dejar la madera suave al tacto. Un buen lijado mejora el resultado final y el acabado.

Colocamos las piezas en forma de 'U', sujetamos con sargentos y atornillamos con el taladro atornillador. Es importante mantener el taladro recto para que los tirafondos entren derechos.

Tapamos las cabezas de los tornillos con tapones o pegatinas adhesivas. Si lo deseas, puedes aplicar una capa de barniz o cera natural para proteger la madera.

Encajamos la pieza sobre el reposabrazos y comprobamos la estabilidad. La superficie queda lista para apoyar una taza, el mando o el móvil sin peligro de manchas ni vuelcos.