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Cómo cuidar a tu bulldog en verano ¡con 4 consejos!
Hogarmania, 30 de julio de 2021
Los perros bulldog, tanto francés como especialmente inglés, suelen sufrir más que otras razas con el calor del verano. ¿Qué te parece si les ayudamos a combatir las altas temperaturas?
Si tienes un perro de esta raza, te aconsejamos que tengas en cuenta varias recomendaciones para que se sienta mejor en las épocas calurosas. ¡Toma nota!
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Los perros de raza bulldog sufren más que otras razas con las altas temperaturas debido a su condición de branquicéfalos (perros de nariz achatada y hocico corto), su peso y complexión y su piel sensible.
Si tienes un bulldog inglés o un frenchie debes tener en cuenta algunas cuestiones para que estén saludables y puedan disfrutar de caminar relajados los días de calor. A continuación te damos varios consejos y recomendaciones esenciales para que tu bulldog esté sano en verano.
4 consejos para cuidar un bulldog en verano
1.- Protégele contra los parásitos externos
Con la llegada del buen tiempo y las altas temperaturas, todos los perros se ven expuestos a parásitos externos como pulgas, garrapatas o mosquitos. Estos se encuentran por las zonas verdes de hierba y prados y aprovechan la vulnerabilidad de nuestras mascotas para saltar sobre ellos.
Sin embargo, los bulldogs, especialmente los ingleses, tienen la piel extremadamente sensible, por lo que los efectos de los parásitos pueden ser peores para ellos debido a que su curación también es más lenta.
¿Y cómo le podemos ayudar? Toma nota de los siguientes consejos:
- Realiza las desparasitaciones anuales que le correspondan.
- Elígele el mejor collar antiparasitario para que le proteja los 8 meses de primavera y verano.
- Puedes ayudarle también a repeler los parásitos con 7 repelentes caseros muy fáciles de elaborar.
- Otra opción para ahuyentar a los parásitos es aplicarle una pipeta desde la cabeza hasta la cola recorriendo toda su espalda.
- Realiza una o dos visitas al veterinario para descartar posibles problemas o enfermedades.
En el mercado existen multitud de tipos de collares y pipetas, pero si tienes dudas, tu veterinario te recomendará cuál es el mejor según las características de tu mascota. ¡No dudes en preguntarle!
Nuestro veterinario nos aconsejará cómo prevenir a nuestra mascota de los parásitos.
2.- Mantenle hidratado continuamente con mucha agua en casa y en la calle
Los perros de raza bulldog sufren dificultades para respirar si el ambiente está especialmente cargado o es demasiado caluroso. Su hidratación es esencial, tanto dentro como fuera de casa. Si tienes un bulldog no te puedes olvidar de sacar una botellita de agua para que beba y se refresque, o bien visitar con frecuencia las fuentes que os encontréis por el camino donde vayáis a andar.
En el mercado puedes encontrar botellas de agua especiales para perros muy prácticas y perfectas para que tu perro beba agua por la calle.
Y no te olvides de refrescar su piel ya que por su envergadura son animales que tienden a acumular grasa y pasar más calor que otras razas. Además, es muy probable que a tu perro le resulte divertido que le mojes, ¡Aprovecha para jugar con él cuando toque refrescar la piel!
Nuestro perro debe tener siempre agua a su disposición.
3.- Cuida su piel para evitar que se queme
La piel de los bulldogs es muy sensible y fina, y por sus pliegues es normal que sufran irritaciones. Además, debido a su pelaje corto y a su piel clara en muchas ocasiones, es muy fácil que si están expuestos durante mucho rato al sol su piel se acabe quemando.
Evita ir a pasear a espacios donde el sol vaya a darle de forma directa y continuada. Intenta caminar por la sombra y aplícale un protector solar especial para perros. Por otro lado, si lo llevas a la playa deberás darle un chapuzón con agua dulce después del baño ya que el agua salada resecará su piel.
Y si te apetece cuidar su piel con tratamientos caseros, echa un vistazo a los 4 remedios caseros para cuidar la piel que te facilitamos.
Debemos controlar que nuestro bulldog no se exponga al sol directamente.
4.- No dejes que sus almohadillas se quemen
Al igual que es posible que se congelen sus patas sobre la nieve en invierno, también es posible que se quemen sobre un suelo ardiente. Y es que si el suelo quema para ti, ¡también quema para tu perro!
Por ello, si ves que hace muchísimo calor y te imaginas que el suelo puede estar ardiendo, no saques a tu mascota a pasear y espera a que caiga el sol para caminar con él. Las almohadillas de esta raza son especialmente sensibles y pueden hacerse heridas fácilmente.
Nosotros te aconsejamos que compruebes la temperatura del suelo colocando tu mano unos segundos sobre una baldosa de la calle, si no aguantas el calor, todavía será pronto para sacar a tu mascota a pasear. ¡Espera a que caliente menos el sol!
Cuida las patitas de tu mascota y protégelo del calor del asfalto.