7 escapadas de última hora para disfrutar de la Semana Santa en España

Si aún no has decidido dónde pasar la Semana Santa, no te preocupes: todavía estás a tiempo de organizar una escapada inolvidable. España ofrece rincones perfectos para desconectar, relajarte y disfrutar del ambiente primaveral. Desde pueblos con encanto hasta destinos costeros donde el sol ya calienta, aquí tienes siete opciones ideales para una escapada de última hora, pensadas para quienes buscan bienestar, belleza natural y planos relajantes. Prepara la maleta, porque Semana Santa está a la vuelta de la esquina.
Estos viajes no solo son perfectas para Semana Santa, también te ofrecen una oportunidad de autocuidado, contacto con la naturaleza y desconexión del estrés diario. Aprovecha los días festivos para recargar energías y volver con las pilas puestas.
1. Cádiz: luz, playas y cultura sin agobios
En primavera, Cádiz se convierte en un destino perfecto para quienes buscan buen clima, gastronomía y cultura. A diferencia del verano, en Semana Santa puedes recorrer sus calles sin aglomeraciones, disfrutar de las playas casi vacías y tapear frente al mar. Recorre el casco histórico, piérdete por el barrio del Pópulo y relájate en la playa de La Caleta al atardecer. Para una experiencia completa, incluye una visita a alguna bodega cercana de Jerez o una sesión de spa con vistas al mar.
2. Albarracín (Teruel): un viaje al pasado entre montañas

Considerado uno de los pueblos más bonitos de España, Albarracín es ideal para una escapada de desconexión. Sus calles empedradas, casas color salmón y murallas te transportan a otra época. Es perfecto para quienes buscan una experiencia tranquila, rodeada de naturaleza y belleza arquitectónica. Puedes hospedarte en una casa rural con encanto y aprovechar para darte un respiro digital. Además, la zona ofrece rutas de senderismo y miradores espectaculares.
3. Granada: tradición, relax y belleza a los pies de la Alhambra
Granada es un clásico que nunca falla. Durante la Semana Santa, sus procesiones son impresionantes, pero también es posible disfrutar de sus teterías, baños árabes y del embrujo del Albaicín sin necesidad de grandes planos. La combinación de cultura, belleza y relax la convierte en una escapada redonda. Reserva un tratamiento en un hammam tradicional, disfruta de las vistas desde el Mirador de San Nicolás y saborea una tapa con cada bebida: la tradición granadina sigue viva. Te puede interesar Dónde comer bien en Granada y que productos y platos típicos no te puedes perder.
4. Llanes (Asturias): naturaleza, mar y sabor en el norte

Si prefieres un destino verde y con brisa marina, Llanes es una joya del norte. Esta villa marinera asturiana combina playas salvajes, rutas costeras y una gastronomía de diez. Puedes disfrutar de paseos por los bufones de Pría, comer fabada o pescado fresco en el puerto y alojarte en hoteles boutique con encanto. Aunque el clima puede ser más fresco, su belleza natural lo compensa con creces. Perfecto para quienes buscan aire puro y paisajes sin filtros.
5. La Garrotxa (Girona): bienestar entre volcanes y bosques
Para una escapada diferente, la comarca de La Garrotxa ofrece tranquilidad, paisajes volcánicos y pueblos medievales como Besalú o Castellfollit. Es una zona ideal para practicar senderismo, alojarse en una masía rural con spa y reconectar con la naturaleza. Además, la oferta de alojamientos ecológicos y gastronomía de proximidad la convierten en un plan de bienestar total. Aquí, cada rincón invita a la calma y al disfrute consciente.
6. Córdoba: patios, tradición y una escapada con aroma andaluz
Córdoba en Semana Santa es una explosión de tradición, belleza floral y rincones que invitan a la calma. Su casco histórico, Patrimonio de la Humanidad, ofrece un entorno ideal para perderse entre calles empedradas y casas encaladas. La Mezquita-Catedral, el Puente Romano o el Alcázar de los Reyes Cristianos son visitas imprescindibles. Pero también puedes disfrutar de sus famosos patios algunos abren en estas fechas y relajarte en los baños árabes mientras saboreas un té moruno. Además, la gastronomía local, con platos como el salmorejo o el rabo de toro, es un valor añadido. Córdoba es perfecta para quienes buscan una escapada cultural con esencia andaluza.
7. Calpe (Alicante): Mediterráneo, relax y vistas al Peñón

Si lo que te apetece es sol, mar y relax sin masificaciones, Calpe es una opción excelente para Semana Santa. Esta localidad alicantina destaca por sus playas de arena dorada, sus aguas cristalinas y su emblemático Peñón de Ifach, que puedes subir si te gusta el senderismo. Pasea por su casco antiguo, disfruta de un arroz en el paseo marítimo o relájate en un hotel con spa y vistas al mar. Su clima suave en primavera invita a los primeros baños de sol, y su ambiente tranquilo lo convierte en el destino ideal para quienes buscan recargar energías frente al Mediterráneo. si te acercas a Alicante, te puede interesar Dónde comer en Alicante desde el desayuno hasta la cena.