Cómo sacar un tornillo roto sin desesperarse

Quitar un tornillo roto puede ser una tarea frustrante y desafiante, especialmente cuando se enquista, se oxida, se rompe, o su cabeza se pasa de rosca. Te enseñamos paso a paso cómo sacar tornillos rotos con tres métodos diferentes.
Cómo sacar un tornillo roto
Sacar un tornillo roto con un extractor

Paso 1
Para sacar el tornillo roto con un extractor, tendrás que hacer un agujero en el tornillo. Para ello, taládralo con una broca más delgada que el tornillo.
Paso 2
Después, cambia la broca por un extractor y, con el taladro en función de desatornillar, retira el tornillo en sentido antihorario.
Un extractor de tornillos es una herramienta diseñada para sacar tornillos rotos, oxidados o con la cabeza desgastada. Puedes encontrarlos en ferreterías o tiendas de bricolaje. Normalmente, se venden en pack con diferentes tamaños de extractores.
Paso 3
Finalmente, si todavía el tornillo no está fuera, agarra la cabeza del tornillo con un alicate y sácalo poco a poco.
Sacar un tornillo roto sin extractor
Utilizando un destornillador

Paso 1
Si el tornillo tiene desgastada la cabeza y no cuentas con un extractor, puedes sacar el tornillo con un destornillador.
Para ello, comienza marcando la cabeza del tornillo con un destornillador y un martillo. Coloca el destornillador en el centro del tornillo y manteniendo en ángulo recto el destornillador da unos golpecitos hasta hacer una hendidura en el tornillo.
Paso 2
Ahora que ya tienes la marca, desatornilla poco a poco hasta que salga el tornillo.
Utilizando una broca fresadora

Paso 1
Se trata de un método más agresivo. Consiste en utilizar una broca fresadora para hacer un orificio alrededor del tornillo.
Paso 2
Después, con un cincel y un martillo retira el material para sacar el tornillo con unos alicates.
Trucos y consejos para sacar un tornillo roto
El truco de la goma
Una forma muy sencilla de sacar un tornillo roto es con una goma elástica. Tendrás que colocar una goma encima de la cabeza del tornillo y apretar con el destornillador encima para desenroscar. La goma se adapta a la cabeza del tornillo desgastada y evita que el destornillador resbale.
Lubricar el tornillo
Si el tornillo sigue sin salir, aplica un aceite lubricante en spray. Estos sprays penetran en las hendiduras y lubrican y eliminan el óxido y la corrosión que bloquean el tornillo facilitando su extracción. Solo tendrás que rociar el spray en el tornillo y esperar el tiempo recomendado por el fabricante antes de desatornillarlo.
Calentar el tornillo con un soplete
Si después de intentar varias formas de sacar el tornillo no lo consigues, puedes intentar aplicarle calor para que el material se contraiga y expanda, facilitando su desbloqueo.
Utiliza un soplete para calentar el tornillo durante aproximadamente 10 minutos. El calor dilata el material y consigue despegar el óxido con facilidad. Inmediatamente después de calentar el tornillo, coloca hielo sobre él. Después de dilatarse a causa del calor, se contrae con el frío y el tornillo se soltará perfectamente.