Postre fácil
Helado de limón
Un clásico del verano que puedes preparar tú mismo con solo tres ingredientes

El helado de limón es ese postre que siempre apetece en verano: fresco, cremoso y con el punto justo de acidez.
Y lo mejor es que lo puedes hacer en casa, sin heladera y con solo tres ingredientes: limón, nata y leche condensada. Te explico paso a paso cómo hacer esta receta en casa.
Índice de contenidos
Ingredientes

-
5 limones (en zumo)
-
500 mililitros de nata líquida muy fría
-
250 gramos de leche condensada
-
2 limas (la ralladura)
-
hojas de menta (para decorar)
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
15 m
Tiempo total
15 m
Alérgenos

Paso a paso
Mezcla la leche condensada y el zumo de limón
En un bol, mezcla la leche condensada con el zumo.

Monta la nata
En otro bol grande y frío, bate la nata para montar con la batidora eléctrica hasta que se forme una crema espesa y suave.
Si usas una batidora manual, asegúrate de no batir en exceso para evitar que se convierta en mantequilla.

Incorpora la mezcla de limón a la nata
Agrega la mezcla de leche condensada y limón a la nata montada, batiendo suavemente con movimientos envolventes para evitar que se baje la nata.

Congela el helado
Vierte la mezcla en un recipiente apto para congelador. Cubre el helado de limón con film transparente o una tapa.
Coloca el recipiente en el congelador y deja que se congelen durante al menos 4-6 horas, o hasta que tenga la consistencia deseada.
Si no tienes máquina para hacer helados, saca el recipiente cada 30-40 minutos durante las primeras 2 horas y remueve bien con un tenedor para evitar que se formen cristales de hielo.

Ralla la piel de una lima
Lava bien las limas y ralla su cáscara o piel, teniendo cuidado de no rallar la parte blanca, ya que puede amargar.
Espolvorea la ralladura de las limas sobre el helado de limón.

Sirve el helado de limón
Una vez que el helado esté bien congelado, sácalo del congelador y déjalo reposar unos minutos a temperatura ambiente antes de servir, para que se ablande un poco.
Sirve en copas, boles, barquillos o conos, decorado con un poco de ralladura de lima y hojas de menta.

Consejos y trucos
El sabor del limón fresco es mucho más intenso que el de los zumos de limón comerciales, por lo que te recomiendo usar limones frescos para esta receta.
Si deseas variar el sabor, puedes agregar un poco de menta fresca picada o un poco de jengibre rallado para que sea aún más refrescante.
La nata para montar debe estar bien fría para que se monte correctamente. Si la nata está demasiado caliente, no se montará bien.
La leche condensada ya aporta bastante dulzura, pero si prefieres un helado menos dulce, puedes reducir la cantidad de leche condensada o añadir más zumo de limón.
Si el helado se congela demasiado, simplemente déjalo reposar a temperatura ambiente durante unos minutos antes de servir, para que tenga una mejor textura.
Preguntas y respuestas
¿Con qué se puede acompañar el helado de limón?
El helado de limón puede acompañar una variedad de postres o ser parte de una comida más grande. Sírvelo con frutas frescas como fresas, frambuesas o moras para un contraste delicioso de sabores.
También puedes acompañar el helado con galletas de avena, galletas de limón o brownie en freidora de aire para una combinación irresistible.
Un poco de mermelada de fresa encima del helado de limón le dará un sabor extra delicioso.
¿Cómo conservar el helado de limón?
Guarda el helado en un recipiente hermético en el congelador. Se mantendrá bien durante 2-3 semanas. Asegúrate de cubrirlo bien para evitar que absorba olores del congelador.