Plato popular
Pollo frito coreano
Una receta irresistible, crujiente y jugosa
El pollo frito coreano es famoso por su textura crujiente y la combinación de especias. A diferencia del pollo frito tradicional, esta receta lleva un doble rebozado. La preparación no es tan difícil: te explico paso a paso cómo hacer este aperitivo crujiente y jugoso de pollo.
Índice de contenidos
Ingredientes
Para el pollo:
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400 gramos de contramuslos de pollo con piel
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200 gramos de maicena (harina de maíz refinada)
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200 gramos de harina de trigo
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1 cucharadita pimienta negra
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1 cucharadita de ajo en polvo
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1 cucharada de sal
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1 cucharadita de levadura química
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1 cucharadita de curry en polvo
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1 cucharadita de pimentón
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1/2 cucharadita de jengibre en polvo
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50 mililitros de agua
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50 mililitros de salsa de soja
Para la salsa:
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mostaza
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miel
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sal
Para decorar:
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semillas de sésamo
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cebollino
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
10 m
Cocinado
15 m
Tiempo total
25 m
Alérgenos
Gluten
Soja
Mostaza
Sésamo
Paso a paso
Prepara la mezcla
Corta los contramuslos de pollo en piezas medianas, dejando la piel para asegurar jugosidad y sabor.
En un bol grande, mezcla la harina de trigo, la maicena, pimienta negra, ajo en polvo, sal, levadura química, curry, pimentón y jengibre en polvo.
Reserva la mitad en otro bol, que se usará para un segundo rebozado.
Prepara la mezcla líquida
En otro bol, combina la salsa de soja con el agua y bate con una varilla hasta integrar.
Marina el pollo
Pasa cada pieza de pollo por la mezcla líquida, asegurándote de que se impregne bien. Deja reposar al menos 10 minutos para que absorba los sabores.
Pasa el pollo por la mezcla seca
Tras el reposo, pasa los contramuslos por la mezcla seca, uno a uno. Colócalos en el táper, ciérralo bien y agítalo. Así se formará una capa ligera de rebozado y, al freírlos, no absorberán demasiado aceite.
Reboza todas las piezas de pollo
Haz lo mismo con cada pieza de pollo, de una en una. Cierra el táper, agítalo y retira el pollo. Debe quedar cubierto con una capa fina de la mezcla.
Fríe el pollo
Calienta abundante aceite de girasol en una sartén profunda. Fríe los contramuslos hasta que estén dorados y crujientes por fuera y completamente cocidos por dentro. Retira y coloca sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Sirve el pollo frito coreano y decora con cebollino
En un bol, mezcla mostaza, miel y sal hasta obtener una salsa homogénea.
Sirve el pollo frito caliente, acompáñalo con la salsa de mostaza y decora con semillas de sésamo y cebollino picado.
Consejos y trucos
La doble capa de harina y especias aporta una textura extra crujiente.
Corta los muslos de pollo en piezas de tamaño uniforme para que se cocinen por igual y no queden crudos en el centro.
La mezcla no debe quedar demasiado espesa; si lo está, añade un poco más de agua. Debe ser ligera, lo justo para cubrir bien el pollo y que se impregne por completo.
Asegúrate de que el aceite esté bien caliente antes de freír para lograr un acabado crujiente.
Preguntas y respuestas
¿Se puede usar otra parte del pollo?
Sí, muslos o alas funcionan igual, aunque los contramuslos con piel mantienen mejor la jugosidad.
¿Se puede hacer al horno o freidora de aire?
Sí, aunque el resultado será menos crujiente que en fritura tradicional, pero sigue siendo delicioso y más ligero.
¿Cómo conservar el pollo frito coreano?
Guarda las sobras en un recipiente cerrado hasta 2 días.
Para mantener el crujiente, recalienta en freidora de aire o sartén en lugar de microondas.
¿Con qué se puede acompañar el pollo frito coreano?
El arroz blanco es el acompañamiento clásico del pollo frito coreano. También puedes servirlo con una ensalada de zanahoria. Otra opción, para un menú más asiático, es acompañarlo con kimchi.
