Receta exprés
Sardinas en freidora de aire
Una receta ideal para disfrutar de sardinas en verano sin llenar la cocina de humo ni grasa

Las sardinas en freidora de aire son una forma rápida y ligera de disfrutar este pescado tan sabroso y nutritivo. Se cocinan con muy poco aceite y quedan doradas y crujientes, sin necesidad de freírlas.
En menos de 10 minutos tienes un plato saludable, perfecto para una cena rápida o como aperitivo.
Índice de contenidos
Ingredientes

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6 sardinas
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2 dientes de ajo
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perejil
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sal en escamas
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2 limones
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aceite de oliva virgen extra
Raciones
2
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
2 m
Cocinado
10 m
Tiempo total
12 m
Alérgenos

Paso a paso
Precalienta la freidora de aire
Precalienta la freidora de aire a 180 °C durante 3-4 minutos. Esto ayuda a que las sardinas se cocinen de forma más pareja y queden bien crujientes.
Luego, pincela la base de la cesta con un poco de aceite de oliva para evitar que el pescado se pegue. También puedes colocar una hoja de papel para freidora, aunque esto es opcional.

Cocina las sardinas
Coloca las sardinas limpias y secas en la cesta, en una sola capa. Si tienes muchas, cocínalas en tandas para una cocción uniforme.
Píntalas por encima con aceite de oliva virgen extra utilizando un pincel de cocina.
Cocina durante 8 a 10 minutos a 180 °C, o hasta que estén doradas y crujientes por fuera, y la piel comience a despegarse ligeramente.

Dales la vuelta
A mitad de la cocción, puedes darles la vuelta con cuidado usando unas pinzas de cocina. Así se dorarán por igual, aunque si son pequeñas no siempre es necesario.

Prepara un majado de ajo, perejil y limón
En un mortero o cuenco pequeño, machaca un diente de ajo con hojas de perejil fresco picado. Añade un chorro generoso de aceite de oliva virgen extra y unas gotas de zumo de limón.
Este majado es ideal para rociar las sardinas recién hechas, aunque también puedes disfrutarlas simplemente con sal.

Sirve las sardinas
Una vez listas, retira las sardinas con cuidado y colócalas en un plato. Rocía con el majado de ajo y perejil, o acompáñalas con unas rodajas de limón. Sirve al momento, bien calientes.

Consejos y trucos
El tiempo de cocción puede variar según el tamaño de las sardinas. Si son grandes, necesitarán algo más de tiempo; si son pequeñas, revísalas a los 6-8 minutos.
Asegúrate de colocarlas en una sola capa dentro de la cesta para que se cocinen de forma uniforme. Si las amontonas, no se dorarán bien.
Si las sardinas están enteras, límpialas y retira las escamas con un cuchillo o con las manos. Puedes cortar las cabezas si lo prefieres, aunque también puedes cocinarlas enteras si te gustan así.
Preguntas y respuestas
¿Cómo saber si las sardinas están bien cocidas?
Deben estar doradas por fuera, y la carne, cocinada pero jugosa por dentro. Si las abres ligeramente, el interior debe verse opaco y tierno.
¿Se pueden cocinar las sardinas sin piel en la freidora de aire?
Sí, aunque la piel se vuelve crujiente y aporta una textura deliciosa. Además, ayuda a mantener la humedad del pescado. Si lo prefieres, puedes retirarla antes de cocinar, pero perderás parte de esa jugosidad.
¿Con qué acompañar las sardinas en freidora de aire?
Las sardinas combinan muy bien con una ensalada de lechuga y cebolla. También puedes servirlas con pan tostado o pan de pita, y acompañarlas con salsa de yogur o mayonesa casera.
¿Cómo conservar las sardinas cocinadas en freidora de aire?
Déjalas enfriar a temperatura ambiente y guárdalas en un recipiente hermético en el frigorífico. Se conservarán bien durante 1 o 2 días.
Para recalentarlas, ponlas en la freidora de aire durante 3-4 minutos a 160 °C, para que recuperen su textura crujiente sin resecarse.
Si quieres hacer una gran cantidad, puedes congelarlas una vez cocinadas. Déjalas enfriar por completo y guárdalas en una bolsa para congelar. Sin embargo, es mejor consumir el pescado recién hecho: su sabor y textura no tienen comparación. Siempre que puedas, evita congelarlo.