Si limpias la habitación de una vez ahorrarás mucho tiempo y harás el trabajo más sencillo. Prueba este método paso a paso de cómo limpiar una habitación en seco.
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Hogarmania, 20 de octubre de 2021
Ambiente
Si limpias la habitación de una vez ahorrarás mucho tiempo y harás el trabajo más sencillo. Prueba este método paso a paso de cómo limpiar una habitación en seco.
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Hogarmania, 20 de octubre de 2021
Limpiar "en seco" una habitación, sin fregadero ni grifos, se resume en una sola palabra: polvo. Dado que el polvo vuela y se agita en el aire, debes limpiar la habitación de arriba a abajo. Cuando el polvo cae es cuando puedes atraparlo y mostrarle la puerta de salida... o la aspiradora.
Pon la papelera fuera de la habitación para vaciarla. Si trabajas en equipo, que un miembro de éste vacíe toda la basura. Si trabajas solo, vacía y vuelve a colocar la papelera al final de cada sesión. En los trabajos en equipo divide las tareas: quién quita el polvo, quién pasa la aspiradora y quién vacía la papelera.
Muévete en la habitación por partes y empieza por arriba. Usa un plumero largo para quitar el polvo de las cornisas, los marcos superiores de las puertas y de los cuadros y fotografías. Abrillanta los cristales de cuadros y ventanas con un trapo rociado suavemente con limpiacristales; usa un quitagrasas para eliminar las huellas de los dedos.
Sigue con las superficies horizontales.
Quita el polvo de los objetos decorativos de la repisa de la chimenea, las estanterías y las mesas y luego la base de los objetos. Echa un poco de limpiador para ablandar la suciedad en los alféizares. Limpia las partes bajas de los muebles y los rodapiés.
La etapa final: aspiradora, y fuera.
Después de haber hecho la habitación de arriba abajo ya no habrá polvo en los muebles. Pasa la aspiradora por el suelo desde la esquina hasta la puerta... luego llévala fuera de la habitación. Vacía y vuelve a colocar la papelera. Como toque final, refresca la habitación con un ambientador para que cuando salgas quede un olor agradable.
- Recoger no esparcir. El objetivo número uno es recoger el polvo no esparcirlo. Olvídate de sacudir los trapos para quitar el polvo y úsalos con la calma y el control de los movimientos de un practicante de taichi. Atrapa las motas de polvo y no dejes que se dispersen en el aire para volver a posarse en las superficies que ya están limpias.
- El polvo va de arriba a abajo. Cuando quitas el polvo es inevitable que algunas motas vuelen por mucho cuidado que pongas. Date una segunda oportunidad para atrapar las partículas que se han escapado y limpia de arriba abajo: luces, cuadros colgados, marcos de puertas y ventanas, muebles y rodapiés.
- Trapos húmedos. La humedad atrae y atrapa el polvo. Pero que no estén muy húmedos, porque pueden dañar la madera y las superficies delicadas. Como alternativa, pulveriza el trapo con un spray. No lo hagas nunca directamente sobre las superficies y no abuses de estos productos.