Atacama: el desierto que imita a Marte y florece contra todo pronóstico
Norte de Chile
¿Sabías que el desierto de Atacama florece y la NASA lo usa como simulador de Marte? Descubre este fenómeno único y su amenaza actual.

En el corazón del desierto más árido del planeta, donde no llueve durante años y la radiación solar puede ser letal, algunas plantas del desierto no solo sobreviven, sino que se adaptan de manera sorprendente.
Una de ellas, por ejemplo, ha desarrollado un sistema que desafía la lógica: espinas que condensan agua de la niebla y la canalizan hacia el tallo, incluso cuando están invertidas.
Si la tecnología logra imitar este sistema natural, podríamos crear dispositivos para capturar agua del aire en zonas áridas, tal como lo hacen estos cactus.
Un lugar donde no debería haber vida... pero florecen 2.500 especies
El desierto de Atacama se encuentra situado en el norte de Chile, en concreto, entre el Pacífico y los Andes. Más allá de ser un simple paisaje seco y rojo, es un laboratorio vivo de adaptación extrema, biodiversidad y potencial tecnológico.
En sus casi 180.000 km², Atacama presenta condiciones tan extremas que la NASA lo ha utilizado como simulador de Marte. Mientras que algunas zonas no han visto una gota de lluvia en décadas, en otros lugares como Iquique la precipitación media anual es solo de 1,3 mm.
Las temperaturas pueden variar hasta 30 grados entre el día y la noche, y los suelos están saturados de sal. Sin embargo, según un informe reciente del CSIC, unas 2.500 especies de plantas vasculares habitan este desierto.

Casi la mitad son endémicas, es decir, no se encuentran en ninguna otra parte del mundo. Así lo explica el investigador del CSIC Carlos Pedrós-Alió en su libro Las plantas de Atacama. El desierto cálido más árido del mundo, publicado por el CSIC y la editorial Catarata.
Pedrós-Alió, microbiólogo que lleva más de 20 años estudiando los microorganismos de la región, descubrió algo inesperado: vida vegetal en uno de los entornos más hostiles del planeta.
Su trabajo profundiza en la fisiología vegetal básica que permite a estas especies captar y conservar recursos vitales en condiciones extremas.
El libro describe los distintos tipos de desiertos que forman Atacama: desde el desierto costero hasta el andino, pasando por el temido desierto absoluto, donde la lluvia es casi inexistente.
El milagro del desierto florido y los oasis de niebla
Quizás el fenómeno más sorprendente que ocurre en Atacama solo algunos años es el desierto florido. Después de lluvias inusuales, cientos de hectáreas se cubren de flores durante meses, en un espectáculo natural que parece sacado de otro mundo. Una de las más impactantes ocurrió en 2011 cuando esta floración cubrió una totalidad de de 11.000 km².
Las plantas emergen desde semillas que han permanecido bajo tierra durante años y años. Lo hacen con una estrategia que se le conoce como oportunismo cauto. Esta consiste en que no germinan todas a la vez, haciendo que que varias generaciones sobrevivan, aunque cambien las condiciones.

Además, las flores son grandes, coloridas y ricas en néctar, lo que favorece la polinización y asegura la reproducción de estas especies que apenas tienen unos meses para florecer, polinizar y dejar semillas antes de que el desierto vuelva a secarse.
En los acantilados costeros, existen los llamados oasis de niebla donde la humedad que llega desde el océano queda atrapada por la cordillera, creando un microclima constante. Aquí crecen hasta 700 especies de plantas, de las cuales el 40 % son endémicas.
La niebla no solo hidrata, sino que también aporta nutrientes disueltos en sus microgotas, convirtiéndose en una lluvia perfecta para estas plantas especializadas, según el informe del CSIC.
Como has podido comprobar, el desierto de Atacama es un auténtico ejemplo de vida en condiciones extremas. Sin embargo, esta resistencia frente a las amenazas climáticas no está pudiendo con las humanas: se ha convertido en uno de los vertederos de ropa usada que más crece en el mundo.
Este problema, ligado a la moda rápida, es tan grave que las Naciones Unidas lo han calificado como una emergencia ambiental y social a nivel global.
Pedrós-Alió, Carlos (2024). Las plantas de Atacama. El desierto cálido más árido del mundo. CSIC y Los Libros de la Catarata. Disponible online.