A continuación vamos a hablar sobre las puntas imantadas, una herramienta muy útil a la hora de taladrar.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Bricomanía, 24 de octubre de 2016
Herramientas de bricolaje
A continuación vamos a hablar sobre las puntas imantadas, una herramienta muy útil a la hora de taladrar.
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Bricomanía, 24 de octubre de 2016
A la hora de apretar y soltar tornillos, es fundamental emplear correctamente la herramienta y utilizar la punta adecuada. El mercado nos ofrece distintas puntas, de diferentes tamaños y formas. En este briconsejo de Bricomanía os enseñamos los distintos tipos de puntas imantadas para taladros.
Paso 1
Al atornillar, es muy probable que los tornillos no se mantengan estables y se terminen cayendo. Para evitar ese problema, es recomendable utilizar puntas imantadas. Dentro de la gran variedad de tamaños y formas de puntas, escogeremos la más adecuada en cada caso.
Paso 2
Dentro de la gran variedad de tamaños y formas de puntas, escogeremos la más adecuada en cada caso
Paso 3
Podremos acoplarla directamente a nuestro destornillador o utilizar un porta puntas imantado, que nos facilitará el trabajo. Colocaremos el tornillo y veremos que éste se mantiene recto. Otra opción es utilizar un imantador. En este caso, hemos escogido este modelo que nos permite imantar y desimantar las puntas, tan sólo introduciéndolas por sus dos aberturas.
Paso 4
Además, hoy en día encontraremos una amplia gama de destornilladores manuales imantados, de diferentes tamaños y formas.
Paso 5
Aun así, no todos los materiales se pueden imantar. Es el caso del acero inoxidable. Por eso, si a la hora de apretar un tornillo de este material queremos que se nos mantenga estable, utilizaremos cinta adhesiva.
Paso 6
Con una tira, uniremos la pieza a la punta del atornillador.
Paso 7
De esta manera tan sencilla, evitaremos que el tornillo se caiga sin tener que sujetarlo con las manos.