Tipos de cierre para ventanas correderas y cómo escoger el mejor

Si quieres aumentar la seguridad de las ventanas de tu casa, es fundamental que conozcas los tipos de cierre de ventanas correderas más comunes. ¡Toma nota!
Los tipos de cierre de ventanas correderas más comunes
Cierres embutidos o de uñeros
Son tiradores encastrables en las ventanas, es decir, un hueco donde puedes introducir los dedos para abrir o cerrar la ventana deslizando el marco.
Se trata de uno de los tipos de cierre para ventanas correderas más utilizados, porque no sobresalen y por su diseño elegante y minimalista, que no resta protagonismo a la estética de la ventana.
Su principal característica es que quedan integrados en el marco, lo que permite mantener una línea visual limpia y discreta. Este sistema es muy fácil de utilizar, ya que funciona mediante una pequeña pestaña o palanca que bloquea la hoja de la ventana de forma sencilla.
No obstante, el nivel de seguridad que ofrece es básico, por lo que se recomienda su uso en pisos altos o en zonas donde el riesgo de intrusión es bajo. Aun así, su diseño compacto y su buena durabilidad lo convierten en una opción funcional para quienes priorizan la estética y la comodidad.
Ventajas:
- Diseño discreto y moderno
- No sobresale
- Cómodo y fácil de utilizar
- Se integra perfectamente con la ventana
Inconvenientes:
- No ofrece un gran nivel de seguridad.

Cierres multipunto
Los cierres multipunto son uno de los tipos de cierre para ventanas correderas más seguros. Su mecanismo permite bloquear la hoja en varios puntos del marco simultáneamente al accionar la manilla, lo que dificulta significativamente cualquier intento de forzar la apertura.
Además de ofrecer una mayor protección frente a robos, este sistema también mejora la hermeticidad de la ventana, ya que al distribuir la presión de cierre de forma uniforme, reduce filtraciones de aire y mejora el aislamiento térmico y acústico.
Por todo ello, es una opción especialmente recomendable para plantas bajas o viviendas con acceso directo desde el exterior.
Ventajas:
- Alto nivel de seguridad
- Mejora la estanqueidad y el aislamiento térmico/acústico
- Distribuye mejor la presión de cierre
Inconvenientes:
- Precio más elevado que otros sistemas convencionales
- Instalación más compleja y, en algunos casos, requiere personal especializado
Cierre con llave
Algunas ventanas correderas incorporan una cerradura con llave como sistema de bloqueo adicional. Este tipo de cierre suele instalarse en el centro de la hoja y requiere introducir la llave tanto para abrir como para cerrar la ventana, lo que proporciona una capa extra de seguridad.
Es una opción especialmente útil en viviendas con niños pequeños, ya que impide que puedan abrir la ventana sin supervisión.
Ventajas:
- Aumenta la seguridad
- Evita que los niños puedan abrir la ventana
- Fácil instalación
Inconvenientes:
- Puede resultar incómodo si se necesita abrir la ventana con frecuencia
- Requiere tener la llave siempre a mano

Cierre por gancho o pestillo
Este tipo de cierre funciona con un pestillo metálico que se engancha a un soporte para bloquear la ventana. Normalmente, se suele utilizar como refuerzo de seguridad.
Ventajas
- Fácil de usar y de instalar.
- Aporta un extra de seguridad.
Desventajas
- No se recomienda como único cierre si se busca seguridad elevada.
- Puede no ser muy estético si queda a la vista.
¿Qué tipo de cierre para ventanas correderas es el más seguro?
Si vives en una planta baja o tienes ventanas especialmente expuestas, es fundamental reforzar su seguridad con un buen sistema de cierre. Los tipos de cierre de ventanas correderas más recomendables en estos casos son los cierres multipunto y los cierres con llave, ya que dificultan notablemente la apertura desde el exterior.
Además, puedes añadir elementos de seguridad extra, como los cierres con pestillo, que actúan como un refuerzo adicional al sistema principal. Estos mecanismos están diseñados para impedir el deslizamiento de la hoja de la ventana, aumentando así la protección frente a posibles intrusiones.
Para maximizar la seguridad, también puedes incorporar otros recursos complementarios, como pinzas metálicas para bloquear las persianas o incluso verjas para ventanas. Estas soluciones ayudan a prevenir accesos no autorizados y aportan una mayor tranquilidad en el hogar.
¿Qué tipos de cierre de ventanas correderas elegir?
Antes de decidirte por un tipo de cierre para tus ventanas correderas, es importante tener en cuenta varios factores:
- Ubicación de la ventana: no es lo mismo una ventana interior, en una planta alta, que una situada a pie de calle o en un bajo. Cuanto más expuesta esté, mayor nivel de seguridad necesita.
- Frecuencia de uso: si sueles abrir y cerrar la ventana con frecuencia, necesitarás un sistema de cierre práctico, resistente y fácil de usar. Por ejemplo, una cerradura con llave puede resultar poco cómoda en el día a día.
- Nivel de seguridad necesario: valora si necesitas un sistema que proporcione alta protección ante posibles intrusiones o si basta con un cierre básico que simplemente mantenga la ventana cerrada.
- Presupuesto disponible: algunos cierres son más costosos, pero ofrecen mayor durabilidad, aislamiento térmico y seguridad, por lo que pueden resultar más rentables a largo plazo.
- Estética y compatibilidad: asegúrate de que el cierre elegido sea compatible con el diseño y tipo de ventana que tienes, para mantener la armonía estética y asegurar una instalación adecuada.