¿Puede un particular reformar su propio baño?: Todo lo que necesitas saber
Si quieres hacer reformas en el baño y no sabes si puedes realizarlas tú mismo, este artículo te interesa. Vamos a responder las dudas más comunes sobre si puede un particular reformar su propio baño y qué permisos de obra necesita.
El baño es una de las zonas de la casa donde más reformas se realizan. La adaptación del espacio a personas de movilidad reducida, el deterioro de las tuberías o un cambio de imagen son los principales motivos de las reformas en el baño. Pero ¿puede un particular reformar su propio baño?
A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber.
¿Qué habilidades y conocimientos se necesitan para reformar un baño por cuenta propia?
Antes de desmontar las primeras baldosas o desinstalar el viejo lavabo, es crucial evaluar tus habilidades y conocimientos. La reforma del baño implica una variedad de tareas que van desde la fontanería hasta la instalación de azulejos. Dependiendo del tipo de reforma que se quiera realizar, necesitaremos unos u otros conocimientos.
- Conocimientos de fontanería: para realizar reformas en el baño debemos tener unos conocimientos básicos de fontanería. Reparación de fugas o la instalación de sanitarios necesitan de estos conocimientos.
- Facilidad para trabajar con herramientas eléctricas: en algunos casos, podrías necesitar habilidades eléctricas para instalar iluminación o ventiladores en el baño.
- Conocimientos de albañilería: la capacidad para trabajar con mortero es crucial para el revestimiento o el alicatado del suelo del baño o la instalación de un platos de ducha.
Si careces de alguna de estas habilidades, necesitarás contar con profesionales cualificados.
¿Cuáles son los permisos y regulaciones necesarios para reformar un baño por cuenta propia?
Cuando realicemos obras en casa, debemos solicitar permiso o licencia de obra. Existen dos tipos de licencia de obra que debemos saber diferenciar:
- Obra mayor: son reformas que implican modificaciones en la estructura del edificio o en la superficie total del inmueble. Estas reformas tienen mayor complejidad y, por lo general, se necesita contar con profesionales cualificados. Por ejemplo, cambiar el uso de un espacio como la habitación y convertirlo en cuarto de baño. No contar con licencia de obra mayor trae multas que puedes llegar a los 300.000 euros.
- Obra menor: se tratan de reformas que no necesitan modificaciones estructurales. Por ejemplo, la sustitución o renovación de suelos, techos o baños, así como el cambio de instalaciones eléctricas o la sustitución de las ventas y puertas. No contar con licencia de obra menor puede traer multas que van desde los 600 a los 1000 euros.
Normalmente, las reformas en los baños son de obra menor pero las normativas suelen variar en las distintas zonas geográficas de nuestro país.
Para pedir una licencia de obra menor, tendremos que pedir un permiso de obra en el ayuntamiento, normalmente al Departamento de Urbanismo. Necesitaremos rellenar un formulario oficial acompañado de la documentación necesaria y abonar las tasas correspondientes.
¿Cómo planificar la reforma del baño por cuenta propia?
Para el éxito de la reforma se necesita seguir una planificación detallada:
- Evaluar el espacio y la reforma que queremos hacer: debemos analizar el tamaño del baño y su disposición. Tomaremos todas las medidas necesarias.
- Establecer un presupuesto: debemos establecer un presupuesto para saber los materiales que vamos a elegir y el presupuesto que podemos invertir en profesionales.
- Diseño: tendremos que planificar la disposición de los nuevos accesorios.
- Elección de materiales: elige azulejos, pinturas y accesorios que se ajusten al diseño que tienes en mente y al presupuesto.
- Cronograma: tendremos que establece un cronograma realista considerando la disponibilidad de tiempo y las posibles interrupciones.
