El castaño es uno de los árboles que, cada otoño, da uno de los frutos más apreciados del invierno: las castañas. Conocemos un poco más sobre él.
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Árboles
El castaño es uno de los árboles que, cada otoño, da uno de los frutos más apreciados del invierno: las castañas. Conocemos un poco más sobre él.
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Los castaños son unos árboles muy comunes en el Hemisferio Norte, apreciados por sus frutos y su madera. Las especies adultas pueden alcanzar hasta 30 metros de altura con un porte extendido y una corteza que, con los años, se va arrugando y cuarteando.
Las hojas de este árbol caducifloro, oblongas y lisas son de color verde oscuro en primavera y verano y en otoño se tornan amarillas.
Cambio de tonalidad del follaje a lo largo de las estaciones
Florece en primavera y produce unas pequeñas flores de color crema de las que luego nacerá el fruto.
Las castañas se cosechan en otoño, cuando maduran, y están recubiertas de un coraza que las protege de los animales. Las castañas son muy apreciadas para el deleite gastronómico, tanto en platos principales como postres.
El castaño crece bien en climas húmedos, con tierras sueltas y frescas, y tiene una gran resistencia al frío, aunque necesita cierto calor estival para madurar las castañas. De lo contrario, la cosecha puede ser escasa o los frutos pequeños.
Los árboles más bonitos del otoño
El problema más común al que se enfrentan los castaños es a los hongos, sobre todo, al Phytophtora cambivora y Phytophtora cinnamomi que producen una enfermedad comúnmente conocida como tinta y que afecta al árbol desde la raíz.
Para protegerlos de esta enfermedad es preciso un suelo rico en humus y una temperatura suave. Respecto a las plagas, lo más usual son los lepidópteros.
Las castañas se deben conservar en un lugar fresco, seco y al abrigo de los insectos hasta el momento de su consumo o utilización. Si están peladas y cocidas, se pueden conservar durante algunos días en el refrigerador.
También se pueden congelar, tanto crudas como cocidas y, de este modo, se mantienen en buenas condiciones durante aproximadamente 6 meses.
Se aconseja colocar las castañas frescas extendidas en cestos. Nunca se deben introducir en bolsas de plástico, ya que acabarían enmoheciéndose.
Los castaños, que pertenecen a la misma familia que los robles y las hayas, se dividen en cuatro grupos principales dependiendo de su hábitat.