Drácena bambú

Origen: zonas tropicales de África.

Luz: de luminoso a muy luminoso, nunca sol directo.

Temperatura ideal: 16-21 ºC

Temperatura mínima: 3-6 ºC

Riego: pc. húmedo; pd. dejar secar capa superficial entre riegos.

Fertilización: pc. cada mes; pd. cada 3 meses.

Descripción

La drácena bambú es una elegante planta de interior, donde se combina por un lado la rusticidad y adaptación de las drácenas al cultivo en interiores con la elegancia del porte y crecimiento tipo bambú propio de esta especie de drácena.

Sus hojas tienen una hermosa variegación con dibujos amarillentos que le aportan luminosidad. Lo novedoso y atractivo de esta especie de drácena está en sus tallos. Éstos son altos y delgados y emergen desde la base del cepellón, superando en altura al follaje ya establecido. En la coronación de los tallos surgen las hojas que con el peso tienden a arquear los delgados y largos tallos, adquiriendo un porte arqueado parecido al que suelen tener la mayoría de los bambúes.

Cuidados de la drácena bambú

La drácena bambú no es excesivamente exigente en cuanto a luz, pero al contrario de otras especies de drácenas, pide algo más de luz. La colocaremos cerca de una ventana, pero sin sol directo. Con el riego pasa lo mismo que con la luz, ya que esta drácena exige más agua que el resto de especies. Por tanto, no dejaremos que la tierra llegue a secarse del todo, y también evitaremos llegar a encharcarla, y cuando veamos que empiezan a emerger los nuevos tallos la abonaremos quicenalmente.

Consejos

Si hemos optado por esta drácena, y con el paso del tiempo observamos que la mata de hojas es tan densa que no se aprecia la emergencia de los nuevos tallos, aconsejamos podar una tercera parte del follaje, eliminando las ramas desde la base. Al podar la planta, baja la densidad del follaje y por tanto dejamos espacio para poder apreciar el complemento decorativo añadido que supone la emergencia de los tallos.