13 errores que arruinan tus cejas y cómo evitarlos
Cuidado de cejas
Descubre los errores más comunes al depilarte las cejas y aprende cómo evitarlos

Las cejas enmarcan el rostro y tienen el poder de realzar o deslucir nuestra expresión facial. Una depilación en casa incorrecta puede alterar su forma natural, afectando la armonía del rostro. A continuación, te traigo los errores más comunes al depilar las cejas y cómo evitarlos para mantenerlas siempre impecables.
1. Sobredepilación
Eliminar demasiado vello puede resultar en cejas excesivamente finas, lo que puede añadir años al rostro y dificultar su recuperación. Es preferible depilar con moderación y respetar la forma natural de las cejas. Si te excedes, permite que el vello crezca antes de intentar corregir la forma. La paciencia es clave, ya que el vello puede tardar semanas o incluso meses en volver a crecer completamente. Mientras tanto, puedes utilizar lápices o polvos para rellenar las áreas despobladas y mantener una apariencia equilibrada.
2. Uso incorrecto de las pinzas
Las pinzas deben estar en buen estado y ser de calidad para evitar romper el vello o irritar la piel. Utiliza pinzas con buen agarre y asegúrate de extraer el vello en la dirección de su crecimiento para minimizar el dolor y prevenir vellos encarnados. Además, desinfecta las pinzas antes y después de cada uso para evitar infecciones y mantener la higiene.
3. Ignorar la forma natural de tus cejas

Cada rostro tiene una estructura única, y las cejas deben complementarla. Intentar replicar la forma de cejas de otra persona puede resultar en un aspecto poco natural. Es esencial trabajar con la forma y grosor naturales de tus cejas para realzar tus rasgos faciales. Adaptar la forma de las cejas a la estructura ósea y características individuales garantiza un resultado armonioso y favorecedor.
4. No preparar la piel antes de depilar
La piel debe estar limpia y exfoliada antes de la depilación para evitar infecciones y facilitar la extracción del vello. Además, depilarse después de una ducha caliente puede ayudar a abrir los poros, haciendo el proceso menos doloroso. La exfoliación previa elimina células muertas y permite una depilación más eficiente, reduciendo la posibilidad de vellos encarnados.
5. Depilar a contrapelo
Arrancar el vello en dirección contraria a su crecimiento puede causar irritación y vellos encarnados. Siempre depila siguiendo la dirección natural del vello para una extracción más suave y efectiva. Esta técnica reduce el riesgo de dañar el folículo piloso y minimiza el enrojecimiento y la inflamación post-depilación.
6. No medir correctamente

Determinar el inicio, arco y final de la ceja es crucial para una forma equilibrada. Utiliza un lápiz o regla para alinear desde el extremo de la nariz hasta el inicio de la ceja, pasando por el iris para el arco y hasta la esquina del ojo para el final. Esta técnica ayuda a mantener la simetría y proporción adecuadas. Una medición precisa asegura que ambas cejas estén alineadas y proporcionadas, evitando desequilibrios que puedan alterar la expresión facial.
7. Depilar con demasiada frecuencia
Depilar las cejas con demasiada frecuencia puede llevar a la sobredepilación y a una forma inconsistente. Es recomendable esperar al menos dos semanas entre sesiones para permitir que el vello crezca adecuadamente y mantener una forma definida. Respetar los ciclos de crecimiento del vello ayuda a mantener la densidad y forma natural de las cejas.
8. No considerar la técnica de depilación adecuada
Existen diferentes métodos de depilación, como las pinzas, la cera y el hilo. Cada uno tiene sus ventajas y desventajas, y la elección depende de tu tipo de piel, sensibilidad y preferencias personales. Investiga y elige la técnica que mejor se adapte a ti. Por ejemplo, la depilación con hilo es ideal para pieles sensibles, mientras que la cera puede ser más rápida para áreas más extensas.
9. No acudir a un profesional cuando es necesario
Si no estás segura de cómo dar forma a tus cejas o has cometido errores previos, es aconsejable consultar a un profesional. Un experto puede ayudarte a diseñar una forma que complemente tu rostro y proporcionarte consejos para el mantenimiento adecuado. La orientación profesional es especialmente útil si buscas un cambio de forma o recuperación de cejas sobredepiladas.
10. Buscar una simetría perfecta

El rostro humano no es perfectamente simétrico, y forzar una simetría exacta en las cejas puede resultar en una apariencia antinatural. Es mejor aceptar pequeñas diferencias y trabajar para lograr una armonía general en lugar de una simetría exacta. La perfección absoluta puede llevar a una depilación excesiva y a una expresión facial rígida.
11. Usar herramientas inadecuadas
Utilizar herramientas de baja calidad o inadecuadas puede dañar la piel y el vello. Invierte en pinzas de buena calidad y considera el uso de tijeras específicas para cejas y cepillos para mantenerlas en orden. Herramientas especializadas garantizan precisión y reducen el riesgo de errores durante la depilación.
12. No cuidar las cejas después de la depilación
Después de depilar, es importante calmar la piel para evitar irritaciones. Aplica un gel de aloe vera o una crema calmante y evita el maquillaje en la zona durante al menos 24 horas para permitir que la piel se recupere. Además, evita la exposición al sol y al calor excesivo para prevenir inflamaciones o manchas.
13. No mantener una rutina de cuidado
El cuidado de las cejas no termina con la depilación. Es importante mantener una rutina que incluya la hidratación de la zona, el cepillado regular y, si es necesario, el uso de productos para estimular el crecimiento del vello. Una rutina constante asegura cejas saludables, densas y bien definidas, realzando la expresión natural del rostro.
Evitar estos errores comunes al depilar las cejas puede marcar una gran diferencia en tu apariencia y en la salud de tu piel. Recuerda que cada rostro es único, y tus cejas deben realzar tus rasgos naturales. Si tienes dudas o necesitas ayuda, no dudes en consultar a un profesional que te guíe en el proceso.