Detectores de humo: tipos y cómo instalarlos

¿Quieres instalar detectores de humo, pero no sabes por dónde empezar? Te vamos a contar todo lo que necesitas saber sobre los detectores de humo y cómo instalar uno. ¡Toma nota!
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Tiempo total
15 m
Los detectores de humos son uno de los accesorios más importantes para la prevención de incendios en el hogar.
Estos dispositivitos advierten de la presencia de humo incluso antes de que haya llamas. Un elemento indispensable para garantizar la seguridad en el hogar.
En el mercado nos podemos encontrar diferentes modelos y tipos. Vemos cuales son los tipos de detectores de humo más comunes.
Tipos de detectores de humo
Detectores de humo ópticos
Este tipo de detectores funcionan mediante un haz de luz y un fotosensor. Cuando no hay partículas de humo, la luz se dispara en línea recta y no llega al fotosensor. Sin embargo, cuando hay partículas de humo en el detector, la luz se dispersa y una parte de la luz llega al fotosensor activando la alarma.
Los detectores de humo ópticos son uno de los más utilizados, detectan incendios lentos y humos gruesos como los provocados por la quema de muebles y madera. Se utilizan en viviendas, centros comerciales, supermercados,..
Detectores de humo iónicos
Estos detectores de humo contienen una pequeña cantidad de material radioactivo que genera una corriente eléctrica entre dos electrodos. Cuando el humo interrumpe esta corriente, se activa la alarma. Se utilizan en la industria química, ya que detectan el humo no visible y los incendios de rápida combustión.
Actualmente, las restricciones medioambientales han hecho que se encuentren retirados del mercado por el material radiactivo que necesitan.
Este tipo de detector puede detectar partículas que son muy pequeñas y que no influyen en la luz. Esto puede hacer que el humo del vapor genere una falsa alarma.
Detectores térmicos
Estos detectores, no son de humo, sino que son detectores de incendio. Se activan cuando se alcanza una temperatura concreta, normalmente, de 68 ºC. Los detectores térmicos se instalan en locales de 7 metros de altura como mínimo. Son ideales para lugares donde los detectores de humo tradicionales pueden generar falsas alarmas como las cocinas o los garajes.
Detectores de radiación
Como el caso anterior, se trata de un detector de incendio. Los detectores por radiación detectan las radiaciones que producen las llamas mediante diferentes elementos electrónicos. Se suelen utilizar en locales abiertos o sitios con techos altos.

Dónde es más seguro instalar detectores de humo
Los detectores de humo deben estar colocados en lugares estratégicos para garantizar la seguridad ante incendios.
Lo más aconsejable es colocar los detectores en espacios de circulación de las viviendas como los pasillos. En estos espacios, proporcionan una buena cobertura para detectar humo en toda la casa.
Hay puntos dentro de casa que son más propensos a sufrir un incendio. La sala de estar y la cocina son algunos de ellos en los que se recomienda la instalación de un detector. Sin embargo, ten cuidado al instalar detectores de humo en la cocina, ya que pueden activarse accidentalmente por el humo de la cocción normal.
Es mejor instalar detectores de humo a cierta distancia de la cocina para evitar falsas alarmas, pero lo suficientemente cerca para detectar cualquier humo que pueda indicar un incendio.
También es aconsejable ubicar un detector donde los aparatos eléctricos y el cableado es abundante como puede ser en el salón o el comedor.
Si tu casa tiene un sótano o garaje, asegúrate de colocar detectores de humo allí también. Los sótanos a menudo contienen sistemas eléctricos o calderas que pueden ser fuentes potenciales de incendios.
Una vez elegido el lugar donde instalar los detectores de humo, para mayor seguridad, se deben seguir una serie de recomendaciones:
- Colocar el detector en el techo, no en la pared.
- Instalar el detector en la mitad de la estancia , ya que es donde más cantidad de humo se concentra.
- Guardar una distancia mínima de 30 cm entre la ubicación del detector de humo en el techo y los muebles y objetos.
Cómo instalar detectores de humo

Paso 1
El modelo que nosotros hemos escogido además de detectar el humo, percibe la presencia de monóxido de carbono en el ambiente, proporcionándonos mayor seguridad.
Paso 2
Su colocación es muy sencilla. Desmontamos el aparato, presentamos la base en el techo y marcamos los puntos de fijación. El detector de humos debe colocarse fijo en el techo, tan cerca del centro de la habitación como sea posible.
Paso 3
Después, pasamos el detector de metales por la superficie a perforar, con el fin de comprobar que no hay cables ni tuberías que podamos dañar.
Paso 4
Con el taladro en posición de percusión y una broca de widia, del diámetro adecuado, realizamos los orificios.
Para recoger el polvo que se produce al taladrar hormigón o ladrillo, es aconsejable poner un sobre debajo de la zona en la que estamos trabajando.

Paso 5
Una vez hechos los agujeros, introducimos unos tipos de tacos de nylon con la ayuda de un martillo.
Paso 6
A continuación, insertamos las pilas que incluye el propio kit en su compartimento teniendo en cuenta la polaridad.
Paso 7
Ya podemos unir el detector al soporte. Hacemos coincidir las guías de la base con las del aparato y giramos ésta última en la dirección de las agujas del reloj, hasta que quede perfectamente sujeta.
Paso 8
Por último, presionamos el botón de prueba y comprobamos que el detector funciona correctamente.
Este dispositivo nos advertirá de la presencia de humo o monóxido de carbono incluso antes de que haya llamas.