La distribución de las estancias de los hogares también cambia dependiendo de las modas y las tendencias decorativas que se lleven en ese momento. Las decoraciones más tradicionales siempre han incluido paredes y muros para delimitar las estancias entre sí.
Poco a poco esta idea de distribución ha ido modificándose, cambiando sus tendencias hacia espacios más amplios y luminosos, con menos muros que dividieran las estancias.
Entre esos cambios de distribución empezamos a ver cómo cada vez se ha hecho más frecuente incorporar cocinas abiertas a las casas, o modificar la distribución antigua de un piso viejo para tener cocinas abiertas, generalmente, a salones y comedores.
Actualmente buscamos que nuestros hogares sean luminosos, más amplios y acogedores, alejándonos de las tendencias antiguas donde se llevaban mucho los muebles con maderas oscuras, muchos detalles, complementos decorativos de colores oscuros: Marrones, granates, verdes, dorados...
Una decoración con elementos de colores oscuros en suelos, rodapiés, puertas... y con paredes en todas las estancias resta bastante luminosidad a los hogares y los hace ver visualmente más pequeños.
De esta manera nace el término decorativo open concept, donde se busca ganar mucho más espacio en las casas, aprovechar al máximo los metros útiles de las estancias y disfrutar de la amplitud, luminosidad y simpleza que da tener pocas paredes en nuestro hogar.
Fuente: Pinterest
Este tipo de decoraciones y formas de distribución modernas suelen enfocarse, generalmente, en salones, cocinas y pasillos.
Son muy comunes las cocinas abiertas a salones y comedores que, a su vez, conectan con el pasillo de casa.
A través del pasillo llegamos a la cocina y al salón, sin muros que los diferencien. Como mucho, con un muro pequeño y abierto que divida el salón de la cocina.
Fuente: Pinterest
Esta idea decorativa tan original y diferente a las clásicas puede llegar a ser muy bonita, pero a veces integrar el salón, cocina y pasillo también se puede complicar.
Debemos conseguir crear un entorno acogedor donde todos los elementos queden bien combinados entre sí, pero a su vez se distinga que las estancias son diferentes y cada una tiene su toque personalizado y propio.
A continuación, te vamos a enseñar algunas ideas para integrar salón, cocina y pasillo, de una forma bonita, moderna y acogedora, y te vamos a contar también algunos trucos que ayudan a que estas estancias se diferencien, aunque no tengan paredes.
¡Toma nota y ponte manos a la obra aprendiendo a integrar salón, cocina y pasillo de forma bonita, acogedora y agradable!
Un suelo diferente para la cocina
Uno de los trucos más recurrentes a la hora de integrar salón, cocina y pasillo de forma fácil es colocar un suelo diferente en la cocina, para diferenciar la estancia húmeda de la estancia cálida.
Generalmente la cocina es la que divide el pasillo del salón (que normalmente es salón comedor), así que un cambio de suelo original y estampado entre lamas de madera quedará estupendo.
En las cocinas abiertas se lleva mucho colocar suelos de baldosas hidráulicas de mosaicos, que aportan color, originalidad y un toque personalizado a la estancia, y además son un material genial para colocar en zonas con humedad.
Otra opción, muy buena si tenemos una cocina muy pequeña y estrecha, es incorporar una alfombra vinílica en todo el suelo. Este tipo de alfombras son geniales para la cocina, se limpian muy fácil y visualmente, parecen baldosas de mosaicos.
Fuente: Pinterest
Convierte el salón en salón comedor
Es muy común que las casas con open concept en estas tres estancias (salón, cocina y pasillo) cuenten con un salón bastante amplio y cuadrado.
Este tipo de distribución y forma de la estancia resulta muy práctico a la hora de integrar salón, cocina y pasillo, porque podemos colocar una mesa de comedor entre la cocina y el salón y así hacer una división sencilla y práctica de las estancias.
Convertir los salones en salones comedores es una idea estupenda para integrar el salón con la cocina al mismo tiempo que los diferenciamos. Además, si tenemos una cocina muy pequeña, podemos utilizar la mesa del comedor como mesa de diario para desayunar, comer y cenar.
Fuente: Pinterest
Muebles de la fruta en el pasillo
Aunque esto suene un poco extraño, es una manera muy sencilla de diferencias las dos zonas y a la vez crear una conexión entre pasillo y cocina. Con un pequeño mueble frutero, con diferentes cestas y baldas, podemos crear una relación entre el final del pasillo y la cocina.
Dependiendo del espacio que tengas podrás colocar un mueble más amplio o reducido, que no dificulte el acceso a las estancias.
Fuente: Cocina Stensund de Ikea
Colores diferentes pero que combinen
A la hora de pintar las estancias y elegir sus complementos decorativos para integrar salón, cocina y pasillo, lo mejor es que elijas tres colores diferentes.
Por ejemplo: Crema para el pasillo, turquesa para la cocina y un verde azulado para la sala.
Esto hará que cada estancia quede bien diferenciada, pero a la vez se tratan de colores que combinan entre sí y se integran perfectamente.
Fuente: Pinterest