¿Qué es mejor instalar: tarima flotante o suelo laminado?

¿Tarima flotante o suelo laminado? Descubre las claves para diferenciarlos y elegir el mejor para tu hogar. Esta guía te ofrece consejos de expertos en materiales y reformas para tomar la decisión acertada.
Decidir entre una tarima flotante y un suelo laminado es hoy en día más una cuestión de precio que por otro aspecto. Aunque ambos tipos de suelos son muy diferentes en cuanto a su composición y calidad, se confunden fácilmente, e incluso, los propios fabricantes, tiendas o instaladores de pavimentos nos pueden inducir a la equivocación. Pero, ¿cómo identificarlos y saber si elegir tarima flotante o suelo laminado?
¿Cómo diferenciar una tarima flotante de un suelo laminado?
Cuando aparecieron los suelos laminados era fácil distinguirlos, sin embargo, con el tiempo se ha mejorado mucho su aspecto, su resistencia y también se ha reducido su precio. Es por ello que cada vez es más difícil identificarlos y diferenciarlos si no conocemos más sobre ellos. Además, no debemos dejarnos llevar por los nombres que se les da en la publicidad que podamos ver.
¿Cómo es la tarima flotante y cómo reconocerla?
La tarima flotante es un tipo de suelo enteramente de madera, es decir, es una especie de parquet. Esta característica por sí sola le confiere una calidad que no tienen otros tipos de suelos. La diferencia que existe entre una tarima flotante y el parquet es básicamente el modo de instalación.
Así, como su propio nombre indica, la tarima flotante se instala de forma que no queda ligada al suelo. Es decir, flota sobre él, bien clavada a listones de madera o simplemente sobre una lámina de aislante.
En cuanto a su fabricación, distinguimos dos tipos de tarimas flotantes:
1.Tarima flotante maciza
Formada con un único tipo de madera, conformada en tablones de ancho no inferior a los 5 mm. Para su instalación se les practica un machihembrado, de modo que se engarzan unas tablas con otras.
2.Tarima flotante multicapa
Se fabrica con dos o tres tipos de madera:
Capa superior
- Lámina superior de gran calidad y dureza.
- Su espesor que no suele superar los 4 mm.
- Es la que le conferirá el aspecto noble de la madera.
Capa intermedia
- Puede ser de madera maciza o de aglomerado o restos de madera comprimidos.
- Suele tener un espesor entre 6 y 9 mm.
- Es la capa que dispone del machihembrado para facilitar su montaje.
Capa de compresión
- Suele ser de pino o abeto, maderas económicas para reducir el precio de la tarima.
- Su espesor suele ser de 2 o 3 mm.
- Es la capa que le confiere rigidez y robustez

¿Cómo es el suelo laminado y cómo reconocerlo?
El suelo laminado es en realidad un suelo sintético que apenas tiene entre sus componentes a la madera. En su caso, no se utiliza madera como tal, sino restos de madera, serrines o similares comprimidos. Se compone normalmente de 4 capas de diferentes materiales:
Capa resistente
- Varias láminas de melamina prensada y transparente.
- Resistente a desgaste, impactos y arañazos.
- Protege frente a manchas, quemaduras y productos químicos de limpieza.
Capa de diseño
- Lámina de papel impreso en alta resolución con motivos de madera.
Tablero HDF
- Tablero comprimido de fibras de alta densidad.
- Confiere resistencia y consistencia.
- Se aprovechan los desechos de la madera: serrines, etc.
Capa equilibrante
Aporta resistencia a la humedad del suelo.

¿Por qué se pueden confundir el suelo laminado y la tarima flotante?
Hay dos motivos principales por los que se suele confundir uno con otro. Por un lado, la forma de instalación es igual. Y, por otro lado, su aspecto tan parecido y la forma en que se empaquetan y venden.Los dos tipos de suelo se instalan de forma similar. En ambos casos se utiliza una manta de foam de unos 3 mm de espesor, que sirve de barrera antihumedad y amortigua los defectos del suelo para que la tabla de suelo laminado o tarima se amolde bien. Sobre esta lámina protectora se van ensamblando las tablas del suelo laminado o de la tarima flotante.
En cuanto a su aspecto, hoy en día la fabricación de los suelos laminados es tan buena y con tanta calidad que a simple vista es difícil distinguir uno del otro. Debemos coger una tabla de cada tipo y mirar su estructura para entrever que son algo diferentes, aunque, aun así, es difícil ver la diferencia si no se es un conocedor de la materia.
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