El pollo es una de las carnes más versátiles a la hora de preparar cualquier receta. Desde un guiso en salsa de verduras y patata hasta unas albóndigas de pollo. Muchos platos admiten esta carne como su ingrediente principal. Es el caso del pollo Marsala o el pollo al curry.
Y aunque podemos hacerlo por partes (como por ejemplo, unas alitas en freidora de aire o unos muslos con salsa de castañas), también tenemos la opción de cocinar el pollo entero.
Un clásico es asarlo al horno, una forma fácil y rápida de preparar la comida para toda la familia (y una idea perfecta para servirlo en el menú de Navidad). Karlos Arguiñano nos anima a preparar esta receta de pollo al horno tan sencilla aromatizada con toques mediterráneos y con unos trucos para que nos quede muy jugosa por dentro y tostadita por fuera.
¡Anímate a preparar esta receta porque te sacará de cualquier apuro!
Ingredientes para 4 personas
- 1 pollo
- 2 patatas
- 2 cebolletas
- 1 limón
- 8 dientes de ajo
- agua
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta
- tomillo
- 3 ramas de romero
Cómo hacer un pollo asado al horno
Precalienta el horno a 180º con calor arriba y abajo. Mientras, limpia el pollo retirando los restos de plumas y excesos de grasa.
Mezcla en un bol la pimienta negra y la sal con 2 cucharadas de aceite y el zumo del limón.
Remueve bien y una vez esté todo bien integrado, úntalo bien por todo el pollo hasta que quede bien embadurnado. Reserva el resto de mezcla para preparar su cama.
Corta las cebolletas en juliana y las patatas en rodajas de un centímetro. Sazona y salpimenta todo en conjunto con la mezcla que te ha sobrado.
Unta aceite en una bandeja de horno y coloca los trozos de cebolleta y patata por encima.
Remueve bien todo para que quede bien sazonado y hazle un hueco en el centro. Coloca el pollo encima e introdúcele 2 ramitas de romero, un poco de tomillo y los ajos aplastados.
Riega todo con un poco de agua (o si lo prefieres caldo, vino blanco o cerveza). Introdúcelo en el horno y ásalo unos 45-55 minutos aproximadamente.
Es importante que a mitad de cocción, remuevas la guarnición para que no se quede quede pegada o se queme.
Sirve el pollo asado en un plato con su guarnición. Mezcla el jugo de la bandeja de horno con perejil picado y viértelo por encima. Adorna con otra ramita de romero ¡y a disfrutar de este plato 10!
Dale un toque más de sabor a tu pollo al horno
Karlos Arguiñano nos propone hacer la receta de pollo asado con manzana para que le dé un extra de sabor dulce irresistible. Sólo tendrás que sazonarlas y salpimentarlos junto a la patata y la cebolla y añadirlo a la cama del pollo.
Pela las manzanas, descorazónalas (con ayuda de un descorazonador) y córtalas también en rodajas de un centímetro.
Otra opción es sustituir el agua por un caldo de pollo, un vino blanco o una lata de cerveza. Una vez evaporado el alcohol en el horno, le darán otro toque espectacular y sabroso.
Trucos y consejos que te pueden interesar
Cómo conseguir que el pollo al horno quede jugoso
Un truco para que esta carne asada quede más tierna y sabrosa es untar con mantequilla toda la piel del pollo tras haberla sazonado y salpimentado. Luego sólo tendrás que colocarlo sobre la cama de patatas y cebolla y meter la bandeja al horno.
Conseguirás que el pollo te quede jugoso por dentro y crujiente por fuera.
Con qué acompañar el pollo al horno
Las recetas de carnes asadas que ya llevan su guarnición son fantásticas, ya que simplemente con acompañarlas de una ensalada ligera y elegir un postre poco pesado, conseguiremos un menú completo y equilibrado.
Este pollo al horno de Arguiñano incluye patatas y cebolla, por lo que puedes combinarlo con una ensalada de escarola, manzana y nueces, o una de rúcula, pera y queso fresco.
Y luego, de postre, escoger una tarta de queso fresca, un mousse con las frutas que te gusten (mousse de mango, mousse de melón, mousse de naranja) o el clásico flan exprés de huevo.
