Pie de león, propiedades, cuidados y reproducción en el jardín

¡Descubre el encanto del pie de león! Sumérgete en el fascinante mundo de esta planta, desde su historia ligada a la alquimia hasta sus propiedades medicinales, hay mucho por explorar en este artículo. Aprenderás cómo cuidarla correctamente en tu jardín y cómo reproducirla fácilmente.
¿Conoces el pie de león? Se trata de una planta muy común en los prados húmedos y que quizás te haya podido pasar desapercibida por su pequeño tamaño. Sin embargo, puede ser muy común en los Pirineos o en las montañas cantábricas. ¡No te preocupes, yo tampoco la conocía! Se trata de una planta con unas hermosas hojas y una preciosa historia que relaciona su delicadeza con la mismísima alquimia.
En este artículo hablamos sobre el manto de la señora (o de dama), cómo es esta especie, cómo cuidarla correctamente en nuestro jardín y algunas curiosidades relacionadas con ella. ¿Te interesa?
Características del pie de león
El pie de león (en concreto, Alchemilla vulgaris), también conocido como alquimia común o el manto de la señora, es una especie perteneciente a la familia de las rosáceas y que es nativa de Europa, aunque también puede encontrarse en algunos prados y áreas abiertas húmedas de regiones asiáticas y de América del Norte.
Existen distintas especies dentro del mismo género Alchemilla muy similares entre sí, tanto físicamente como por los cuidados que requiere.

Se trata de una planta perenne, con un tamaño de entre 10 y 50 centímetros, que está principalmente caracterizada por sus hojas. Estas son de tonalidades verdes o grisáceas, redondeadas y ligeramente lobuladas y dentadas, además, están cubiertas por finos y pequeños pelitos que le dan una cierta apariencia aterciopelada y un tacto muy suave.
Su baja estatura es debida a la presencia de un rizoma rastrero del cual aparecen tallos ramificados de los que brotan estas bonitas hojas.
A partir de mayo y hasta final de verano ocurre su floración, donde aparecen pequeñas flores (realmente inflorescencias) de color verde-amarillento, formando una especie de ramillete que en botánica conocemos como corimbos y que carece de especial valor ornamental.
Quizás te sorprenda saber que su nombre científico, en concreto el género, ha sido dado gracias a que esta planta tuvo en el pasado algún tipo de valor para la alquimia. Esto es debido a que en la Edad Media se creía que el agua proveniente del rocío, que se recogía de sus hojas gracias a que quedaba retenida por estos pelitos foliares, era la más pura. ¡Interesante! ¿No crees?
Propiedades medicinales del pie de león
Sin duda el gran valor histórico de esta planta ha sido su uso en la medicina tradicional, principalmente como antidiarreico gracias a la presencia de taninos, pero también como antiinflamatorio y antipirético gracias a la presencia al ácido salicílico.

Destaca enormemente su papel en el tratamiento de las dolencias en muchas mujeres, ya que su poder antiespasmódico ha sido muy utilizado para aliviar el dolor abdominal, además de que ayuda a regular el ciclo menstrual. Pero no es la única especie que ayuda con estas afecciones, te presentamos otras plantas medicinales para la salud de la mujer.
A pesar de lo útil que puede resultar esta planta, en muchos puntos de nuestro planeta tiene el potencial de convertirse en una especie invasora debido a su tendencia expansiva y a su capacidad para enraizar fácilmente sus tallos. Por este motivo, debemos ser muy cuidadosos cuando introducimos especies en nuestros jardines, ya que es nuestra responsabilidad como jardineros impedir que estas reemplacen a nuestra flora autóctona.
Cuidados de la Alchemilla vulgaris
Ubicación
Debido a su hábito rastrero, lo ideal sería poder plantarlas directamente en el suelo para que así pueda crecer libremente y ocupe toda la superficie horizontal que podamos permitirle.
No tiene un valor especialmente ornamental cuando se cultiva en maceta, ya que tiene un crecimiento vertical muy limitado. Si aun así nos decidimos por esta modalidad de cultivo, te recomiendo que lo hagas en macetas anchas y bajas, con una gran superficie que pueda colonizar libremente.
En nuestro jardín se adecuará bien tanto a pleno sol como a semisombra, aunque cuantas menos horas diarias de sol reciba, su crecimiento será menos vigoroso y su floración más escasa. Por tanto, salvo que nuestro jardín sea muy caluroso o el sol pueda ser muy intenso, te recomiendo que la sitúes lo más alejada posible de techos, paredes u otras plantas más altas.
Esta ubicación no es favorable solo por la luminosidad, sino porque de esta manera podrás ver cada mañana como el agua queda retenida en sus hojas. ¡Esto y un café son la mejor manera de empezar un día!
Riego
Aunque podría parecernos que esta especie es relativamente carnosa y tendrá una gran demanda de agua, en realidad, una vez está completamente establecida es una planta bastante resistente a la sequía.

Aunque requiere un habitual riego, no sufrirá en exceso en verano, aunque sus hojas y flores pueden mostrarse más frágiles, marrones y con falta de turgencia si están expuestas a sol directo, altas temperaturas y falta de agua. Por este motivo, un riego moderado, pero constante, es la mejor herramienta para mantenerlas sanas y vigorosas, sobre todo en verano.
Abono y sustrato
Esta especie es bastante tolerante a los diferentes tipos de suelo, tanto los muy arenosos como los muy arcillosos. Sin embargo, en estos últimos debemos ser precavidos, ya que, aunque agradece la humedad edáfica, un suelo mal drenado podría ser fatal pata esta planta.
Suele crecer con vigorosidad con un pH neutro o ligeramente ácido, que pueda encontrarse entre unos valores de 6 y 7, por lo que no es algo por lo que debamos preocuparnos en nuestro jardín.
Se trata de una especie con unos requerimientos tan mínimos que no creo necesario el uso de abonos para un crecimiento vigoroso, aunque si decidimos abonarla no será perjudicial.
Poda
La poda de esta planta, como ocurre con el resto de rastreras, puede ser algo difícil. En general no será necesario realizar podas más allá de que queramos reducir su extensión horizontal o disminuir su densidad.

Sin embargo, quizás pueda ser necesario hacerlas después de un verano especialmente caluroso o tras un periodo de sequía para retirar sus partes más dañadas y desgastadas y estimular su crecimiento, pudiendo aprovechar para separar diferentes rizomas y así propagar la especie.
Plagas y enfermedades
Siguiendo con la robustez de esta especie, no suele verse afectada por plagas de insectos. Su único enemigo, y de nuevo, es relativamente resistente también a esto, es la alta humedad del suelo, lo que podría favorecer la aparición de hongos. Por este motivo te recomiendo que favorezcas buena circulación interna del aire, pudiendo realizar podas de aireación y que seas cuidadoso con el riego.
Reproducción del pie del león
Como ocurre en otras especies rastreras, la reproducción asexual es extremadamente sencilla. Para ello, simplemente basta con cortar el rizoma, tanto en primavera como en otoño y separar diferentes partes del ejemplar, pudiendo replantarlos para que crezcan de manera independiente.
Sin embargo, también existe la posibilidad de la reproducción sexual mediante semillas, que deberán ser plantadas en primavera y que suele dar muy buenos resultados en poco tiempo. Por si te interesa, en el siguiente artículo te explicamos la diferencia entre la reproducción sexual y asexual en las plantas.
Como has visto, la Alchemilla vulgaris es una especie todoterreno que a los aficionados al jardín nos encantan. Con muy pocos cuidados podrás disfrutar de ella y de su delicadeza en tu jardín, además podrás fácilmente reproducirla y regalarla a amigos y familiares. ¿A qué esperas para disfrutar del rocío en sus hojas?