Descubre los colores y textiles ideales para refrescar la casa en verano
Trucos decorativos
Con sutiles cambios puedes conseguir ambientes más ligeros, alegres y refrescantes

¿Quieres dar un aire refrescante a la decoración de tu hogar en los meses estivales? Los textiles y los colores son grandes aliados para refrescar la casa en verano. Con sutiles cambios en las texturas y tonalidades puedes conseguir ambientes más ligeros, alegres y refrescantes. Descubre a continuación los colores y tejidos más apropiados para llenar tu casa de vitalidad y frescor durante los meses de calor.
Colores ideales para refrescar la casa en verano
El verano es una época que transmite vitalidad, luz y frescura que nos anima a disfrutar de los espacios exteriores y recrear esa misma sensación en nuestros interiores. Renovar los colores de nuestro hogar durante esta temporada no solo transforma el ambiente, sino también influye positivamente en nuestro estado de ánimo, infundiendo energía, optimismo y bienestar.
La gama cromática de azul está asociada con la frescura y tranquilidad. El azul celeste o agua aporta sensación de calma y serenidad evocando el cielo y el mar. Funcionan bien en salas de estar y dormitorios, proporcionando un ambiente relajante que contrarresta el calor exterior. Puedes combinarlos con blancos o neutros para potenciar esa sensación de frescura y luminosidad.

El verde es un color que evoca la frescura y la vitalidad de la naturaleza, tiene la capacidad de crear ambientes relajantes y revitalizantes, proporcionando una sensación de calma que contrasta con el calor del verano. Puedes combinarlo con blancos para un look fresco y limpio, o con tonos madera para un toque más natural y cálido. Además, añadir plantas de interior potenciará esta conexión con la naturaleza y purificará el aire.

Los tonos naturales y terrosos (terracota, ocre, marrón, beige, etc.) son ideales para conectar los espacios interiores con la naturaleza. Estas tonalidades evocan paisajes estivales que aportan una sensación de frescura y calidez terrosa. Puedes combinarlos con elementos de madera o fibras naturales para potenciar esa conexión con la naturaleza.

Los colores neutros, especialmente el blanco, son adecuados para refrescar cualquier espacio. El blanco refleja la luz natural, lo que ayuda a mantener las habitaciones luminosas y frescas. Combinado con tonos beige, se logra un ambiente acogedor y fresco. Estas opciones son perfectas para lugares como la cocina o el salón, donde se busca una atmósfera energizante y limpia.

Añade acentos de color con complementos como cojines, plaids, alfombras, para añadir interés visual sin abrumar el ambiente.

El amarillo pálido aporta un toque luminosidad y de alegría a los espacios interiores. Este color, que evoca a la luz del sol, puede ser utilizado en áreas como baños o salones, donde se busca generar una atmósfera brillante y acogedora. Combina fácilmente con otros tonos, tanto neutros como vibrantes, creando composiciones de colores veraniegos y llenos de energía. Puedes utilizarlo en paredes, textiles o pequeños detalles decorativos para un efecto radiante.

Los colores pastel como el rosa suave, el lavanda y el durazno son perfectos para refrescar la casa en los meses de verano. Estos tonos aportan suavidad y calidez sin resultar pesados, lo que permite crear un entorno ligero y agradable, ideal para habitaciones infantiles o de descanso. Además, evocan una sensación de calma, y bienestar, creando ambientes serenos y relajantes. Puedes combinarlos con blancos o grises claros para realzar su delicadeza.

Dale un toque de frescura a tu hogar con textiles frescos y ligeros
Para combatir las altas temperaturas del verano es necesario crear un ambiente fresco y acogedor en nuestro hogar. Los textiles juegan un papel fundamental, ya que pueden transformar el ambiente fácilmente consiguiendo una atmósfera fresca, ligera y agradable que refleje la alegría de la temporada estival.
Las cortinas de lino son un aliado ideal para combatir el calor. Su ligereza permite que fluya la brisa, iluminando los espacios de una forma natural. Opta por tonos claros como el blanco, el beige o grises suaves, y si lo deseas, patrones florales delicados para dar un aire alegre y fresco. Además de ser transpirables, aportan un toque elegante y natural a la decoración.

El algodón es una excelente opción para el verano. Renueva las fundas de los cojines, almohadas y sábanas por otras de algodón 100%, que son suaves al tacto, transpirables y fáciles de lavar. Elige colores claros o estampados veraniegos para potenciar esa sensación de frescura y ligereza. Además de ser confortable, el algodón absorbe la humedad, ayudando a mantenerte fresco durante las noches cálidas.

Decántate por manteles de lino, algodón o poliéster de alta calidad para crear ambientes más frescos, tanto en los interiores como en los espacios exteriores. Estos materiales son transpirables y permiten que el aire circule, evitando así que el calor se acumule. Los colores claros y los estampados florales o geométricos transmiten energía y alegría al ambiente.

Las alfombras de yute aportan estilo y frescura al suelo. Es un material resistente, sostenible y transpirable, que ayuda a mantener la frescura bajo los pies. Es ideal para dar un toque natural y fresco a la decoración de la casa. Combina las alfombras con muebles de madera clara para conseguir un efecto natural y veraniego.

Renueva los textiles y colores de los espacios exteriores
Con la llegada de la temporada cálida es el momento ideal para renovar los textiles y colores para crear ambientes más frescos, alegres y luminosos acordes con la energía del verano.
Para los espacios exteriores, es aconsejable optar por paletas que complementen el entorno natural. Colores como los tonos tierra, verdes suaves y azules tranquilos pueden crear un ambiente armonioso. Puedes dar acentos de color con tonalidades vibrantes como el amarillo mostaza, turquesa, coral… que aportan alegría y vitalidad.

Los textiles de exterior deben resistir las inclemencias del tiempo, como la exposición al sol, la lluvia, la humedad y los cambios de temperatura, para mantener su apariencia y funcionalidad durante toda la temporada. Por ello, es importante elegir materiales duraderos y fáciles de limpiar, como el poliéster, el acrílico o tejidos con tratamientos específicos para exteriores.

Consejos para combinar textiles y colores. Si optas por cojines con estampados, asegúrate de equilibrarlos con algunos lisos. Esto mantendrá el espacio visualmente equilibrado y permitirá que cada cojín tenga su protagonismo.

Crear un punto focal. Utiliza un elemento grande como una alfombra de exterior colorida para atraer la mirada. Luego, construye el resto de la decoración alrededor de este punto focal, eligiendo textiles y accesorios que complementen sus colores y texturas para lograr una composición visualmente atractiva y equilibrada. Por ejemplo, si la alfombra tiene tonos vibrantes, opta por cojines en colores neutros que incorporen sutilmente algún color presente en la alfombra.
Añade plantas y flores de temporada para dar vida al espacio exterior y aportar un aroma fresco y agradable. Esto refuerza la conexión con la naturaleza, creando un oasis de tranquilidad y bienestar que invita a relajarse y disfrutar del buen tiempo.
