Tipos de sistemas de calefacción

El invierno ya está aquí y la calefacción se convierte en un elemento fundamental para mantener la casa caliente. A la hora de decantarnos por un sistema de calefacción es importante que conozcamos bien los diferentes tipos de sistemas de calefacción que podemos encontrar en el mercado y todas sus ventajas y desventajas. ¡Lo vemos en profundidad!
¿Cuáles son los tipos de sistemas de calefacción más comunes?
Calefacción de gas
Es el tipo de sistema de calefacción más popular. Se utiliza tanto para calefacción como para agua caliente sanitaria. Su gran rendimiento calorífico y su energía limpia la convierten en una de las mejores opciones.
La calentador de gas calienta el agua gracias al gas y con una bomba se manda el agua a un circuito cerrado como los radiadores de agua o el suelo radiante.
El más utilizado es el gas natural que ofrece un abastecimiento continuo de energía con un alto poder calorífico. Sin embargo, en zonas aisladas en las que no llega el suministro se utiliza gasóleo o gas propano.

Calefacción eléctrica
Se trata de uno de los tipos de sistemas de calefacción más utilizados. Una de las mayores ventajas de este sistema es la facilidad en la instalación y la manera rápida de proporcionar calor.
Sin embargo, el alto precio de la electricidad, comparándolo con otros combustibles, la convierten en una opción menos atractivas en zonas donde hace mucho frio o se debe hacer un uso frecuente.
Dentro de este sistema podemos encontrarnos con varios tipos de calefacción:
Los radiadores o las estufas eléctricas:
son uno de los sistemas más cómodos ya que no se necesita ninguna instalación y desprende calor rápidamente. Estos radiadores almacenan calor que se genera por las resistencias que convierten la electricidad en calor.
Son radiadores cómodos al poder fijarlos en la pared o transportarlos de una habitación a otra de forma sencilla. Además, no necesitan mantenimiento y son estufas económicas. Normalmente, se utilizan como complementos a otro sistema de calefacción para calentar estancias concretas.
Emisores termoeléctricos:
son los radiadores de aceite. Se utilizan para calentar pequeñas y medianas estancias. Si encendemos el radiador, el aceite se calienta y calienta el metal del radiador. Para que el radiador de aceite funcione hay que conectarlo a una corriente eléctrica. Cuando se enciende, se calienta una resistencia eléctrica que contiene en el interior. Una vez que esto ocurre, se calienta el aceite del interior y se distribuye el calor a las placas metálicas. De este modo, la superficie del radiador se calienta y dispersa el calor por la habitación.
Caldera eléctrica:
la caldera eléctrica calienta el agua y envía esta agua a un circuito de radiadores de agua o al suelo radiante.
Bomba de calor:
también se le conocer como aire acondicionado, emite calor o frío mediante la energía eléctrica. Es una opción interesante ya que podremos utilizarlo tanto en verano como en invierno. La inversión inicial es baja y es un sistema eficiente. Podemos elegir la temperatura que queramos y programarlo. Se recomienda para climas templados y no excesivamente fríos.
Convectores eléctricos:
son dispositivos de calefacción que funcionan mediante la convección, un proceso por el cual el aire caliente asciende y el aire frío desciende. Estos dispositivos están diseñados para calentar el aire de una habitación al hacer que el aire frío ingrese al convector, se caliente y luego se libere nuevamente en la habitación.
funciona por ondas de radiación infrarroja que calientan los objetos y las personas.

Calefacción de biomasa
Es uno de los tipos de sistemas de calefacción más actuales. Son la opción más ecológica y eficiente. Ofrecen un alto rendimiento calorífico de fuentes de energía renovables como la leña, los pellets o los huesos de aceituna.
- Calderas de biomasa: estas calderas funcionan como las de gas pero utilizando biomasa como combustible. La combustión de la biomasa genera calor que se transmite al circuito de agua de la caldera y posteriormente se distribuye por el circuito de los radiadores.
- Estufas de pellets: las estufas de pellets están de moda y es que es uno de los sistemas de calefacción más eficientes del mercado. Generan calor a través de la combustión de pellets , un combustible ecológico y con un gran poder calorífico que le permite conseguir un alto rendimiento energético. Los combustibles de pellet o leña son los más eficientes energéticamente, sin embargo los pellets tienen más rendimiento que la leña. La estufa, además de con pellets, funciona con electricidad; por tanto, necesitáremos una toma de corriente.
Aerotermia
La aerotermia es uno de los tipos de sistemas de calefacción más recientes. Un sistema de energía renovable limpia muy eficaz que proporciona un ahorro energético considerable en comparación con sistemas de calefacción convencionales. Extrae en torno al 70% de la energía del aire.
La aerotermia con radiadores funciona mediante una bomba de calor que se coloca en el exterior y extrae la energía del aire para calentar el agua que circula por los radiadores.
Si se utiliza aerotermia con radiadores convencionales, se necesitará aerotermia de alta temperatura, mientras que si utilizamos aerotermia con radiadores de baja temperatura, utilizaremos aerotermia de baja temperatura.

Ventajas y desventajas tienen los diferentes tipos de sistemas de calefacción
Cada tipo de sistema de calefacción tiene sus propias ventajas y desventajas, y la elección depende en gran medida de las necesidades y preferencias individuales. Vemos los pros y contras de cada sistema para que puedas elegir un sistema de calefacción que se adapte a tus necesidades.
Sistemas de calefacción a gas natural:
- Ventajas: energía limpia y segura que no se necesita acumular. Gran rendimiento calorífico.
- Desventajas: en las zonas aisladas en las que no llega el suministro se debe usar gasóleo o propano.
Calefacción eléctrica:
- Ventajas: No necesitan instalación y generan calor rápidamente. Además, no desprende olores ni humo.
- Desventajas: es uno de los sistemas de calefacción más caros al utilizar gran cantidad de electricidad. No se recomiendan para calentar grandes espacios.
Sistema de calefacción por biomasa:
- Ventajas: un sistema ecológico y eficiente con alto poder calorífico.
- Desventajas: algunos combustibles como el pellet tienen un precio muy variable. Se necesita una salida de humos exterior.
Aerotermia:
- Ventajas: se trata de una energía limpia y eficiente, aprovechan hasta el 75% de la energía que necesita del aire y pueden llegar a generar hasta 4 kW de calor con solo 1 kW de electricidad. Su instalación es sencilla y económica sin grandes obras.
- Desventajas: necesita una bomba de calor exterior, si vives en un piso tendrás que pedir permiso a la comunidad de vecinos. Además, la inversión inicial es alta en comparación con otros sistemas de calefacción.