Conejo al ajillo con patatas

Compartimos la tradicional receta de conejo al ajillo con patatas elaborada por Karlos Arguiñano: una sencilla y saludable receta de carne de conejo que prepararemos en poco tiempo y con la que obtendremos un sabor inolvidable ¡y con el suave toque del ajo! No te la puedes perder porque te va a encantar y encima es plato que se puede comer con las manos (si así lo deseas).
La carne de conejo es limpia, muy poco grasa (ideal si estás siguiendo una dieta baja en calorías), fácil de cocinar, económica, versátil y disponible durante todo el año en los mercados ¿Qué más se puede pedir? Empleando una serie de ingredientes de los de andar por casa elaboraremos un plato de conejo al que no te podrás resistir.
Una alternativa que también está deliciosa es esta receta de conejo crujiente, con un rebozado que le aporta una textura irresistible. En esta ocasión, marinaremos o maceraremos el conejo con un majado especial y lo reservaremos durante 1 hora en el frigorífico ¡verás el espectáculo! Cocina rápida, como comenta Karlos Arguiñano.
Pero espera, porque seguro que te van a encantar las siguientes recetas de conejo que queremos compartir contigo: por ejemplo, esta espectacular propuesta de conejo al cava elaborada por Karlos Arguiñano; el exquisito conejo crujiente con su paso a paso; o la clásica receta de conejo al Jerez, por opciones a la hora de consumir esta sabrosa carne que no sea.
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
25 m
Cocinado
50 m
Tiempo total
1 h 15 m
Ingredientes (4 personas):
- 1 conejo troceado
- 3 patatas
- 1 cabeza de ajos (12 dientes de ajo)
- 150 ml de vino blanco
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta
- 1 guindilla cayena
- 1 rama de romero
- 2 ramas de tomillo
- perejil
Elaboración de la receta conejo al ajillo con patatas paso a paso
Pela 6 dientes de ajo, lamina y ponlos en el mortero. Agrega la cayena y maja todo bien. Añade la rama de romero y las de tomillo (solo las hojas sin tallos) y mezcla bien.

Coloca el conejo en un bol grande, incorpora el majado y vierte un par de cucharadas de aceite. Mezcla bien, tapa el bol con film de cocina y déjalo macerar en el frigorífico durante 1 hora (como mínimo). Retira los trozos de conejo del bol (para evitar que el majado no caiga a la sartén ya que se quemaría) y colócalos en un plato.

Calienta una sartén grande con 5-6 cucharadas de aceite. Pela los otros 6 dientes de ajo, añádelos (enteros) a la sartén, dóralos un poco, retíralos a un plato y resérvalos.

Salpimienta el conejo, incorpóralo a la sartén y fríelo durante 6-8 minutos hasta que se dore. Vierte el vino blanco, dale un hervor, tapa la sartén y cocínalo durante 6-8 minutos más.

Calienta otra sartén con abundante aceite. Pela las patatas, córtalas en dados y agrégalas a la sartén. Fríelas durante 10 minutos aproximadamente. Retira y escúrrelas sobre un plato cubierto con papel absorbente de cocina. Sazona, espolvoréalas con un poco de perejil picado, incorpóralas a la sartén del conejo y mezcla bien.

Reparte el conejo con patatas en 4 platos. Agrega un diente de ajo (dorado) a cada uno y adórnalos con unas hojas de perejil.

Consejos para hacer conejo al ajillo, receta de la abuela
Si hacéis el conejo como en esta receta (friéndolo primero y cocinándolo después), quedará muy jugoso, incluso para aquellos que opinan que la carne suele quedar muy seca.
A la hora de majar el ajo, es recomendable picarlo o filetearlo primero con el fin de que el proceso sea más sencillo y obtengamos un mejor resultado.
Verás qué toque más rico aporta el romero y el tomillo a las carnes, no te lo pierdas, el aroma será totalmente embaucador.
Después de majar el conejo en la nevera durante 1 hora, retira los trocitos de ajo del bol cuando lo vayas a freír, para que no adquiera un sabor a ajo demasiado intenso.
Emplearemos un vasito de vino blanco en la elaboración de la receta, pero no te preocupes, se evaporará, así que estamos ante un free-recipe.
También puedes darle un toque especial incorporando a la elaboración caldo de carne o salsa de limón, verás qué delicia para el paladar.
Con qué se puede acompañar el conejo al ajillo
Este clásico plato de la cocina española admite multitud de acompañamientos, como por ejemplo un sencilla ensalada de lechuga, cebolletas y aceitunas.
Arroz blanco o integral, verduras la vapor o algún puré son algunas de las propuestas que te sugerimos sin olvidarnos de un buen trozo de pan casero, ya que así podrás untar y rebañar la jugosa salsa de este plato ¡y disfrutar de lo lindo con este conejo al ajillo de Karlos Arguiñano!
Preguntas frecuentes relacionadas con la receta de conejo al ajillo de Arguiñano
¿Se puede preparar esta receta con pollo en lugar de conejo?
Sí, por supuesto, es una alternativa que puedes cocinar perfectamente, como verás en esta receta de pollo al ajillo.
¿Se puede usar otra hierba aromática en lugar de romero y tomillo?
Sí, además del tomillo y romero puedes emplear otras hierbas aromáticas que sean de tu agrado como: albahaca, estragón, orégano o cilantro.
¿Cómo hacer la receta más baja en grasas?
Algunas pautas para que esta receta sea más baja en grasas son las siguientes: retirar la piel del conejo, evitar un uso excesivo del aceite, emplear la carne magra de conejo, no emplear vino blanco y controlarnos a la hora de comer las patatas fritas y el pan.
¿Hace falta un mortero para la preparación del majado?
No es necesario disponer de un mortero para preparar el majado, también puedes emplear el lado plano de un cuchillo, un machacador de patatas, un simple tenedor o picar finamente los ingredientes que empleemos en el mismo.