Coliflor con salsa holandesa de cecina, receta de Joseba Arguiñano

Joseba Arguiñano enseña cómo preparar coliflor con salsa holandesa de cecina, gratinada al horno. 'Un bocado apetecible', asegura.
Es un primer plato ideal para disfrutar de esta verdura. La elaboración es sencilla: solo hay que cocer la coliflor y después enriquecerla con esta sabrosa salsa antes de gratinarla.
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
10 m
Cocinado
15 m
Tiempo total
25 m
Ingredientes (4 personas):
- 1 coliflor
- 4 lonchas de cecina
- 4 yemas de huevo
- 3 cucharadas de agua fría
- 1 cucharada de vinagre de jerez
- 80 g de mantequilla
- Sal
- 1 guindilla cayena
- Perejil
Elaboración de la receta coliflor con salsa holandesa de cecina paso a paso
1. Cocina la coliflor
Calienta una cazuela con abundante agua, sazónala. Suelta la coliflor en ramilletes e introdúcelos en la cazuela. Tápala y cuécela durante 10 minutos.
Retira la coliflor y escúrrela bien.

2. Funde la mantequilla
Trocea la mantequilla, ponla en una cazuela y fúndela a fuego suave. Retira la espuma que se forma en la superficie.

3. Monta las yemas en un bol
Corta las lonchas de cecina en daditos y resérvalos.
Pon a calentar un poco de agua en un cazo, introduce un bol de manera que toque el agua (a baño María) y agrega las yemas, el vinagre, el agua y la cayena (picada finamente).
Monta las yemas con una batidora eléctrica de varillas.

4. Incorpora la mantequilla y mezcla
Retira el bol del cazo, vierte la mantequilla poco a poco (teniendo cuidado de no añadir el líquido que queda en el fondo de la cazuela) y sigue montando las yemas con la batidora eléctrica de varillas hasta que liguen.
Incorpora la cecina y mezcla suavemente.

5. Cubre los ramilletes de coliflor con la salsa holandesa de cecina y gratina
Pon los ramilletes de coliflor en una bandeja de horno, nápalos con la salsa holandesa y gratínalos hasta que se doren un poco.

6. Sirve la coliflor con salsa holandesa de cecina
Sirve y decora los platos con unas hojas de perejil.

Consejos de Joseba Arguiñano para hacer coliflor con salsa holandesa de cecina
Cocinar la coliflor correctamente
La coliflor puede cocerse al vapor o hervirse, pero es importante no pasarse con la cocción para que conserve su textura firme y su sabor. Puede prepararse en cazuela tradicional, olla rápida, al vapor o incluso en el microondas.
Sea cual sea el método elegido, lo fundamental es preservar al máximo sus nutrientes y lograr un punto al dente, similar al de la pasta. Debe quedar suave, pero con un toque crujiente que la haga más apetecible al paladar.
Joseba Arguiñano la cuece en agua durante solo 10 minutos. Eso sí, asegúrate de no cocerla en exceso para evitar que se deshaga o quede como puré. Lo ideal es que se mantenga entera y con buena textura.
Preparar una buena salsa holandesa
La salsa holandesa es una emulsión elaborada con mantequilla y zumo de limón o vinagre, y utiliza yemas de huevo como base. Suele sazonarse con sal y un poco de pimienta blanca o cayena. Es famosa por ser el ingrediente principal de los huevos Benedict.
En este plato, la salsa holandesa es fundamental y debe prepararse con paciencia y cuidado. Joseba Arguiñano recomienda elaborarla al baño maría para controlar bien la temperatura y evitar que se corte. La clave está en batir las yemas a fuego muy suave y añadir la mantequilla derretida poco a poco, hasta conseguir una textura suave y cremosa.
Para darle un toque más alegre, Arguiñano incorpora cayena picada. Si no te gusta el picante, puedes omitirla: la salsa seguirá estando igual de sabrosa.
Incorporar la cecina a la salsa
La cecina es una carne curada típica de España, parecida al jamón, pero elaborada a partir de carne de vacuno, equino y, en menor medida, de chivo, conejo o liebre.
Las únicas cecinas con Indicación Geográfica Protegida son la de vaca (cecina de León) y la de chivo (cecina de Vegacervera). También destacan por su calidad la cecina de equino de Villarramiel (Palencia) y la de vacuno de Toro (Zamora).
En esta receta, Joseba Arguiñano añade un toque original a la salsa incorporando cecina picada en dados pequeños. Se mezcla con la salsa ya emulsionada para que mantenga su textura y sabor. La cecina aporta un matiz ahumado y salado que combina a la perfección con la suavidad de la coliflor y la cremosidad de la salsa.
Para conseguir un gratinado perfecto, es importante cubrir bien los ramilletes de coliflor con la salsa holandesa de cecina. El horno debe estar bien caliente para que la salsa se gratine adecuadamente y no se deslice, dejando solo una capa fina.
Con qué se puede acompañar la coliflor con salsa holandesa de cecina
La coliflor con salsa holandesa de cecina es un primer plato bien sabroso, pero se puede complementar con algunos acompañamientos ligeros para completar el menú.
Combina bien con carnes a la parrilla como el pollo, el cerdo o incluso el cordero. Si prefieres pescado, una pieza de salmón o merluza a la parrilla también es una excelente opción, como un salmón en freidora de aire.
Las patatas son un acompañante clásico que siempre funciona bien con salsa holandesa. Puedes prepararlas al vapor o hacer un puré de patatas que sea fácil de combinar con la coliflor y la salsa.
Una ensalada de espinacas con pollo, anacardos y aguacate, puede darle un toque fresco y crujiente al menú. Si no te gustan los anacardos, puedes añadir nueces o almendras.
Un arroz con un toque de limón y hierbas frescas también es un acompañante ideal, ya que absorbe la salsa y complementa los sabores de manera ligera.
Cómo conservar la coliflor con salsa holandesa de cecina
Guarda las sobras de la coliflor con salsa holandesa de cecina en un recipiente hermético en la nevera. La coliflor se conserva bien durante 2 a 3 días, pero es mejor que la salsa holandesa se guarde por separado para que no pierda su textura. Recalienta la coliflor y la salsa por separado antes de servirlas nuevamente.
Aunque la coliflor se puede congelar sin problemas, la salsa holandesa no es ideal para congelar, ya que puede perder su textura cremosa al descongelarse. Congela solo la coliflor sin salsa y luego preparar una salsa holandesa fresca cuando vayas a comerla.
La coliflor puede recalentarse en el microondas o en una sartén con un poco de aceite de oliva para mantenerla tierna.