Las plagas más comunes en las plantas de interior y cómo combatirlas

¡No dejes que las plagas arruinen tus plantas de interior! Conocerlas es el primer paso para proteger tu pequeña jungla en casa. Te contamos todo lo que necesitas saber para mantener tus plantas saludables y libres de amenazas.
Todos queremos mantener nuestras plantas sanas y hermosas, pero a veces, ciertas plagas pueden convertirse en una amenaza para ellas.
En este artículo te contamos cuáles son las más comunes, cómo prevenirlas y, por supuesto, cómo erradicarlas cuando atacan a tus plantas de interior. ¡Toma nota!
¿Cuáles son las plagas más comunes en las plantas de interior?
A continuación, te presentamos las plagas más comunes que pueden afectar tus plantas de interior:
Cochinilla
La cochinilla algodonosa es un insecto ovalado cubierto por una capa de pelusa blanca que protege sus huevos.
Se alimenta de la savia de las plantas, extrayendo nutrientes y debilitándolas. Se encuentra principalmente en hojas, tallos y ramas, y puede afectar no solo a plantas de interior sino también a las del jardín.
Pulgones
El pulgón es un pequeño insecto que se alimenta de la savia de las plantas. Usa un pico para extraer los nutrientes, lo que afecta el crecimiento y la floración. Este puede ser amarillo, verde o negro y es comunes en una gran cantidad de plantas de interior.
Araña roja

La araña roja es un ácaro que mide medio centímetro y cambia de color según la estación, pasando de rojo a verde. Se reproduce rápidamente en ambientes cálidos y secos, atacando una gran variedad de plantas. Sus daños se evidencian con manchas amarillentas y debilitamiento de las hojas.
Mosca blanca
La mosca blanca es un pequeño insecto volador de uno o dos milímetros. Se alimenta de la savia de las plantas, debilitándolas y ralentizando su crecimiento. Sus huevos se depositan en las hojas y puede transmitir enfermedades víricas. Es más común en primavera y verano.
Trips
Los trips son insectos de uno o dos milímetros que se alimentan de las células de las hojas, extrayendo clorofila. Esto provoca que las hojas adquieran tonos plateados.
Son especialmente dañinos en zonas templadas y húmedas, y requieren tratamiento rápido con insecticidas.
Minadores de hojas

Los minadores de hojas son larvas de insectos que crean túneles en las hojas que les sirven de refugio y alimento. Pueden afectar a una amplia variedad de plantas y cultivos, causando daños como la desecación y caída prematura de las hojas.
Ácaros
Los ácaros (o arañuelas) son insectos microscópicos que se alimentan de la savia de las plantas, dejando manchas amarillas o plateadas en las hojas.
A menudo forman pequeñas telarañas, especialmente en condiciones cálidas y secas. Si no se controlan a tiempo, pueden debilitar gravemente las plantas.
Otras plagas menos habituales, pero igualmente presentes en las plantas de interior, son las moscas del sustrato (sus larvas viven en la tierra alimentándose de las raíces de las plantas) y los gusanos de raíz (larvas que se alimentan de las raíces de las plantas).
¿Por qué surgen las plagas en las plantas de interior? Descubre las causas principales
La aparición de todas estas plagas se debe a un conjunto de factores dentro del hogar, como el exceso de humedad o de calor. Aunque cada una tiene condiciones específicas que favorecen su desarrollo, en general, podemos resumir sus causas en las siguientes razones
Estrés en las plantas
Sí, existe el estrés en las plantas. Como mencionamos en su artículo concreto, existen diversos tipos, y uno de ellos es el estrés abiótico, que ocurre cuando un recurso está en exceso o en déficit, sin que necesariamente intervenga otro ser vivo.
Esto afecta la salud de la planta, provocando problemas de crecimiento y aumentando la susceptibilidad a plagas y enfermedades.
Exceso de humedad

Una de las causas más comunes de plagas es el sobrerriego, que aumenta la humedad en el sustrato y favorece la aparición de insectos y hongos en las plantas. Los ácaros, por ejemplo, prosperan en condiciones de humedad excesiva.
Temperatura inadecuada
Las plantas de interior suelen ser originarias de climas tropicales, donde las temperaturas son cálidas y estables.
Si las temperaturas dentro de nuestro hogar comienzan a fluctuar de forma extrema, ya sea por la calefacción o el aire acondicionado, pueden afectar al estado general de las plantas, volviéndolas más sensibles a sufrir plagas.
Falta de circulación de aire
Parece algo sin importancia, pero una incorrecta aireación de nuestras plantas en el hogar desemboca en la proliferación de plagas como las cochinillas y los ácaros.
¿Es posible prevenir las plagas en el hogar?
Como siempre decimos, siempre es mejor prevenir que curar y en esta ocasión, lo repetimos de nuevo. Para ello, existen una serie de recomendaciones a tener en cuenta:
Inspecciona de forma regular tus plantas
Esto es clave para evitar que tu pequeña jungla en casa se vaya al traste. Si no detectas de forma temprana una plaga en una de tus plantas, puede contagiarse al resto y acabar destrozando tu colección.

Al adquirir un ejemplar, ya sea de tu vivero de confianza o tienda online, asegúrate siempre de revisarlo bien para prevenir que traiga consigo alguna plaga que pueda afectar a las demás. Y, si consideras necesario, pon en cuarentena tus nuevas plantas de interior. La precaución siempre será la mejor estrategia.
Controla el riego y la temperatura
Cada planta necesita una frecuencia de riego y temperatura específica. Antes de incorporarla a tu colección, analiza cuáles son sus necesidades y adáptalas a lo largo del año para evitar que sufra cualquier tipo de estrés.
No necesitan la misma cantidad de agua durante todo el año, así que nunca te excedas ni las dejes expuestas a zonas de mucho calor o corrientes.
Comprueba que el contenedor en el que está cultivada tenga sus correspondientes agujeros de drenaje o que el sustrato drene de forma adecuada para evitar encharcamientos.
Mejora la ventilación
El hacinamiento de las plantas, común en muchos hogares, provoca una mala ventilación que favorece la proliferación de enfermedades, plagas y, especialmente, hongos.

Si notas que tus plantas no tienen una circulación de aire adecuada, reubícalas en un lugar con buena ventilación, pero sin corrientes. De esta forma, reducirás la humedad excesiva del sustrato y evitarás distintos problemas relacionados.
Uso de insecticidas naturales
Algunos insecticidas naturales no solo son efectivos para combatir plagas, sino que también actúan como repelentes, evitando que otros se acerquen. Además, al provenir de aceites esenciales o extractos de plantas, son mucho más suaves para ellas y, en general, para el medio ambiente, al no alterar el equilibrio natural.
Mantén una higiene y abonado adecuado
Una planta bien nutrida y con una correcta higiene siempre tendrá más fortaleza para resistir posibles ataques de plagas. Mantén una frecuencia adecuada de abonado, según la especie, y limpia y revisa periódicamente tanto las hojas como el sustrato para evitar cualquier tipo de plagas.
Cómo eliminar las plagas en plantas de interior
Si has llegado tarde a la prevención y alguna de tus plantas sufre el ataque de alguna plaga, existen una serie de métodos efectivo para tratar de erradicarla. En función problema de que se trate y del nivel de infestación, será más recomendable optar por uno u otro.
1. Aislar la planta afectada
El primer paso cuando detectas que una plantita está sufriendo el ataque de una plaga es aislarla del resto de ejemplares. Esto evitará que se propague.
2. Identificar la plaga
Si no sabes de qué tipo de plaga se trata no podrás escoger el mejor método para erradicarla, ¡es importantísimo! Cada una de ellas requiere tratamientos específicos. Fíjate bien en los síntomas de la planta para detectar que se trata de una u otra problemática.

3. Usar insecticidas adecuados
Aunque hay una gran variedad de insecticidas, te dejamos a continuación algunos de los más habituales y recomendados:
- Jabón potásico : Es un fitosanitario natural y pesticida inocuo con el medio ambiente que no contamina, es enormemente barato y eficaz.
- Solución casera (jabón y agua): El jabón es muy efectivo disolviendo las células de los insectos y actúan de manera similar al jabón potásico al descomponer la capa externa de los insectos.
- Aceite de neem : Actúa como insecticida natural y repelente afectando el ciclo de vida de los insectos.
- Alcohol isopropílico: Pasar un algodón con él ayuda a deshidratar a los insectos y destruye sus células.
- Remedios naturales y ecológicos: Si prefieres una opción más natural y ecológica, estos remedios caseros para plantas pueden ser muy efectivos: alcohol de tabaco, alcohol de ajo, infusión de manzanilla... Si te interesa, te mostramos a prepararlos paso a paso.
- Aerosoles químicos (para infestaciones graves): Es un insecticida más potentes que matan rápidamente las plagas pero es importante usarlos con precaución , ya que algunos productos químicos pueden ser tóxicos.
4. Limpiar la planta y su entorno
Después de utilizar el producto específico para eliminar la plaga, es crucial limpiar muy muy bien la planta y su entorno para asegurarte de que no queden plagas restantes, como huevos o larvas.
Además, no olvides revisar el sustrato y, si es necesario, realizar un trasplante a uno nuevo para evitar una nueva infestación. Limpia también muy bien la maceta con alcohol.

5. Repetir el tratamiento regularmente
Erradicar una plaga no es algo de un único día, conlleva su tiempo y algunas conllevan reaplicar en tratamiento durante un tiempo determinado. Ten paciencia y, poco a poco, empezarás a ver los resultados.
Sin embargo, puede ocurrir que la aplicación del tratamiento haya llegado muy tarde y no exista esperanzas de recuperarla. En esos casos más graves, lo más probable es que tengas que desecharla.
Con una vigilancia constante y el uso de métodos eficaces, podrás mantener tus plantas de interior libres de plagas y disfrutar de su belleza por mucho más tiempo.
Si deseas conocer más sobre cómo mantener tus variedades saludables, te animamos a leer nuestro artículo sobre los cuidados básicos de las plantas de interior.