¿Por qué se seca el romero? Causas y soluciones

La planta del romero es una variedad muy fácil de cultivar ya que es muy resistente tanto a las altas temperaturas como a las bajas. Sin embargo, si vuestras variedades siempre se acaban secando, puede que no estéis teniendo en cuenta un aspecto importante. ¡Iñigo Segurola lo aclara!
Si existe una planta aromática indispensable en los hogares españoles, esa es, sin duda, el romero (Rosmarinus officinalis). Se suele utilizar como planta ornamental única, plantada en el jardín, en un macetón o como seto, ya que, al necesitar poca agua, en los climas mediterráneos o en las zonas del sur se desarrolla a la perfección.
¿Te has preguntado alguna vez por qué en ocasiones se seca? Esta fue una de las dudas que respondió Iñigo Segurola a una seguidora en la Feria de Hogarmania de 2015. Esta desconocía la razón por la que se le habían secado las tres plantas de romero que había tenido cerca del alfeizar de su ventana.

Si te identificas con esta situación o simplemente quieres asegurarte de mantener tu romero en óptimas condiciones, este artículo te proporcionará información detallada sobre las razones detrás del secado del romero y cómo puedes solucionarlo.
Razones por las que se seca el romero
A continuación, te presentamos las principales razones por las que el romero tiende a secarse. Entender los factores que afectan en esta planta es fundamental para identificar las causas específicas del problema de nuestros ejemplares.
Mala ubicación
La principal causa de que las plantas de romero se sequen es elegir una ubicación inapropiada para cultivarlas. El romero es una planta que debe estar al exterior, al aire libre, no en interiores ya que requiere mucha luz para crecer correctamente.
Es posible que algunos os preguntéis si se puede tener en el interior en un lugar con cierta claridad, pero la respuesta es clara: no, se debe tener siempre en exteriores o de lo contrario, se secará y morirá. Por ejemplo, si tienes un romero en un tiesto en la cocina para ir cosechando sus ramitas para usarlas en las recetas, notarás que no durará mucho tiempo.

Desconocer si las aromáticas son de interior o exterior repercute negativamente en su cultivo, tal y como le ha ocurrido a nuestra seguidora. Hay algunas plantas aromáticas que podemos tener durante un tiempo en casa para poder cosecharlas como condimento como es el caso de la menta chocolate, la hierbabuena, el cebollino, el perejil, la albahaca y el cilantro.
Sin embargo, no ocurre lo mismo con el romero, el tomillo, la salvia o la ruda. A estas plantas mediterráneas y muy áridas lo que les ocurriría dentro de casa es que tendrían un crecimiento ahilado, con ramas muy largas. Para que crezcan robustas, necesitan estar en el exterior. Si cuentas con un balcón exterior o un jardín, no dudes en cultivarlas en estos lugares.
Viento fuerte y seco
El viento puede provocar que el romero pierda rápidamente la humedad de sus hojas, afectando así a su estado general y provocando sequedad.
Como mencionamos anteriormente, elegir una ubicación adecuada es clave para el éxito de su cultivo. Asegúrate que dónde vaya a estar cultivado sea un lugar protegido del viento fuerte.
Exceso de humedad
El romero es una planta mediterránea conocida por su extrema rusticidad. Puede soportar altas exposiciones al sol, sequías prolongadas e, incluso, temperaturas bajas de -10°C, siempre y cuando, no sean prolongadas.
Las condiciones naturales de esta planta son muy secas, lo que significa que el riego que necesitan es mínimo, de ahí que sea una excelente opción para la xerojardinería.

El exceso de humedad, ya sea por riego excesivo o por estar ubicada en zonas con lluvias constantes, es muy perjudicial. El romero necesita un suelo bien drenado para evitar que el agua se acumule alrededor de sus raíces, lo cual podría provocar la aparición de hongos que terminen secando la planta completamente.
Este problema es especialmente común en el romero rastrero, ya que su crecimiento hacia abajo y la poda para densificarlo pueden aumentar la susceptibilidad a los hongos, especialmente en climas húmedos del norte.
Frío intenso
Las temperaturas extremadamente bajas y continuas pueden dañar las hojas y ramas del romero. Si la planta se expone a heladas intensas de forma prolongada, puede verse afectada por la pérdida de hojas o un secado generalizado.
Es fundamental que protejas tu variedad durante los periodos más fríos del año. Si tienes tu romero en maceta, solo tendrás que trasladarlo a un lugar protegido, y si está plantado en el jardín, añade sobre su base una capa de acolchado o mulching.
Cómo salvar un romero seco
Si has escogido mal la ubicación, ahora ya lo sabes, sitúala en el exterior para que reciba la exposición solar que necesita.
Si ha sufrido un exceso de humedad y sus ramas han empezado a secarse debido a un ataque de hongos, deberás podar todas las ramas afectadas y dejar solo aquellas que estén en buen estado. Sin embargo, si el secado comienza a ser generalizado en toda la planta, lo más probable es que no puedas recuperar tu planta.

Mucha gente tiene ciertas dudas también respecto al abono de esta planta. En el romero es muy malo forzar un desarrollo excesivo, ya que cuanto más lo hagan, más débiles estarán ante el ataque de plagas y enfermedades. A veces, por querer cuidar más las plantas, las afectamos negativamente.
Si quieres abonarla, puedes añadir una barrita de abono en primavera o, como más le gusta a Iñigo Segurola, añadir un poco de estiércol, ya que es una forma muy equilibrada de abonarla, aportando también sanidad.
Esperamos que aplicando estos consejos logres tener unos romeros frondosos en tu balcón o jardín y disfrutes de todas sus ventajas culinarias, medicinales y aromáticas.