Las buhardillas están directamente conectadas con el exterior y es de las zonas del hogar por donde más calor o frío se puede escapar. Al aislar esta zona ahorraremos en energía y nuestro hogar será más confortable.
En el mercado podemos encontrarnos gran variedad de materiales aislantes térmicos que podemos colocar en el techo. Te contamos todas las características de cada aislante para que te puedas decantar por uno.
Tipos de aislante térmico para techos
Antes de decantarnos por un aislante térmico, necesitamos valorar su material y formato.
Del material dependerá el nivel de aislamiento y del formato, la forma en la que se debe colocar.
Podemos encontramos varios tipos de aislantes térmicos para techos según su material:
- Espuma de Polietileno
- Lana de Vidrio
- Poliestireno Expandido
- Espuma de Poliuretano
Espuma de Polietileno
La espuma de polietileno es un material plástico con gran poder aislante, ligero, protector y fácil de instalar.
Se suele vender como aislante en formato en rollo de 5-10 mm de grosor y con una cara de aluminio.
Para aislar el techo con este material, debemos colocar la capa de aluminio hacia arriba. De este modo, el calor que atraviesa el techo será reflejado hacia arriba.
Su vida útil es muy duradera y al tratarse de un material muy ligero es ideal para aislamiento térmico en tejados.
Los paneles o rollos son muy fáciles de manejar e hidrófugos, por lo que evitaran también el paso de la humedad.
Si os decantáis por esta opción , no os podéis perder el paso a paso detallado de cómo aislar el techo de una buhardilla.

Lana de vidrio
La lana de roca o la de vidrio son uno de los materiales más utilizados en el aislamiento. Se trata de una fibra mineral que está elaborada con filamentos de vidrios unidos con aglutinante.
Un aislante térmico y acústico que encontramos en rollo de entre 25 y 100 mm de grosor. Lo ideal es utilizar las mantas aislantes que traen incorporadas una cara de aluminio. De este modo, se impedirá la condensación de vapor.
Un material reciclable flexible perfecto para techos de chapa.

Poliestireno Expandido (EPS):
El poliestireno expandido o Telgopor es un plástico celular con forma esponjosa. Es un material muy recurrido en el aislamiento de techos y paredes.
Las planchas más utilizadas están compuestas por 98% de aire y 1cm de grosor.
Una plancha muy duradera y resistente.

Poliuretano Expandido
El poliuretano expandido o espuma de poliuretano es el material más aislante que podemos encontrar en el mercado. Normalmente, para aislar el techo se utiliza en formato spray. Este método sella todo el techo y lo hace impermeable.
Es ideal para aislar techos de chapa.
También podemos encontrarlo en láminas con una cara en aluminio.

Cómo elegir el mejor aislante térmico para techos
Antes de decantarnos por una opción, es necesario saber las prestaciones del material, su precio y la forma en la que se coloca.
Prestaciones que debe tener un buen aislante:
- Baja conductividad térmica: se trata de la capacidad de trasmitir y conducir el calor. Cuanto más bajo, más eficiente.
- Alta resistencia térmica: capacidad de resistir el flujo de calor. Cuanto más alta, más eficiente.
- Resistencia al paso del vapor de agua: se trata del espesor e impermeabilidad del material. Evita condensaciones.
- Buen comportamiento ante el fuego: se indica con las Euroclases (de la A a la F), clasificadas en la normativa europea.
- Aislamiento acústico: si además de aislar térmicamente el material aísla acústicamente, tendrá un plus.
Teniendo esto en cuenta, el mejor aislante térmico será el que tenga una baja conductividad y una alta resistencia térmica. Además, tendrá que tener gran resistencia al paso del vapor y un buen comportamiento frente al fuego.
Además de estos materiales, también podéis aislar el techo con paneles decorativos.

Ventajas del aislante térmico
- Mejora la eficiencia energética: reduciremos el uso de calefacción y aire acondicionado. Ahorrarás hasta un 80 % en energía.
- Aumento el confort del hogar: la temperatura será homogénea en toda la estancia y aumentará el confort. Evitaremos los cambios de temperatura drásticos durante el día.
- Al aislar las paredes, no solo las aislamos térmicamente, sino que reducimos el ruido que proviene del exterior.