Ingredientes (para 4 personas) de la receta de torrijas con leche condensada
- 1 barra de pan duro
- 1/2 l. de leche
- 3 cucharadas de leche condensada
- 1 limón
- Harina y huevo batido (para rebozar)
- Azúcar
- Aceite de oliva
- canela en polvo
- Grosellas
- Menta (para decorar)
Elaboración de la receta torrijas con leche condensada
Pon la leche en un cazo y añade la leche condensada. Mezcla bien e incorpora 2 trozos de cáscara de limón. Deja que se caliente bien. Corta cuatro rebanadas de pan al bies y colócalas en una fuente. Vierte la leche caliente por encima y deja que el pan se empape bien por los dos lados (dando la vuelta de vez en cuando).
Pasa las rebanadas bien empapadas por harina y huevo batido y fríelas en una sartén con aceite bien caliente (con otro trozo de cáscara de limón). Retíralas a un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Mezcla una cucharada de azúcar con media cucharada de canela en polvo.
Sirve una torrija por ración. Espolvorea por encima el azúcar con la canela, acompaña con unas grosellas y decora con una hojita de menta.
Elige las grosellas que presenten un color rojo intenso, firmes y sin humedades, evita las verdosas, ya que suelen ser ácidas y amargas.
Las grosellas se pueden conservar en el frigorífico durante 2-3 semanas sin lavarlas.
Consejo sobre la receta
Este postre es perfecto después de una ensalada. Aporta cereales, leche y huevo y convertirá la cena en una ingesta completa desde el punto de vista nutricional. Nos aporta proteínas de alto valor nutricional, azúcares de asimilación lenta, grasas cardiosaludables, vitaminas y minerales. Sin embargo, se trata de un postre de consumo ocasional.
Es un alimento interesante para las personas mayores con problemas para masticar y con poco apetito. También interesa especialmente por la leche y el pan, dos alimentos de gran valor nutricional deficitarios en la dieta española.

Con qué acompañar las torrijas con leche condensada
A la hora de comer las torrijas, dependiendo del momento del día, podremos acompañarlas de diferentes maneras.
Si comemos las torrijas para desayunar, lo habitual es que lo hagamos con el cáfe, el té o un vaso de leche.
En cambio, si nos decantamos por unas torrijas a modo de postre o merienda, podemos acompañarlas de natillas caseras o de un batido de vainilla.
Más recetas de torrijas
En este caso, la receta se ha elaborada con leche condensada, pero existen diferentes recetas de este popular postre de Semana Santa.
Una de las recetas más tradiconales es la de torrijas de pan, pero también se pueden hacer otras versiones de la receta como las torrijas acompañadas de dulce de leche, o las torrijas al vino dulce.
Incluso para los que no tienen demasiado tiempo, se puede optar por la receta de torrijas al microondas, en la que conseguiremos este popular postre en muy poco tiempo y de una forma muy fácil.