
Tanto en vacaciones de verano como en fechas especiales de Navidad u otras festividades, es posible que nuestro querido perro sufra un empacho en toda regla. ¿A quién no le ha pasado tras una comida pesada? Al igual sucede con las mascotas que también se dan muchos caprichos golosos o comen más de la cuenta. Y más si es un glotón y se pasa el día comiendo.
Es habitual que durante estas fechas los veterinarios reciban en su consulta múltiples casos de indigestiones, empachos, accidentes u otros aspectos psicológicos. En este caso, te hablaremos de qué es un empacho en perros y cómo puedes ayudarle y prevenirle.
¿Qué es un empacho en perros?
Básicamente se trata de lo mismo que nos sucede a nosotros cuando comemos demasiado o probamos alimentos muy pesados: una indigestión o digestión algo complicada. Puede suceder que si tu perro ha comido mucha cantidad o algún alimento fuerte o en mal estado sufra un empacho, indigestión o irritación intestinal.
Los problemas vienen cuando el perro come sobras o restos de comida humana, ya que muchos de nuestros alimentos contienen sustancias tóxicas para ellos. Para evitar problemas digestivos y sustos mayores, dale sólo su comida específica y evita que coja cualquier comida de vuestra mesa. Si quieres darle un capricho especial elige una golosina especial para mascotas.

No les des tu propia comida al perro ya que podría causarle problema digestivos. ¡Evítalo para garantizarle una buena salud intestinal!
Cómo reconocer un empacho en perros
Los síntomas del empacho en perros se suelen presentar de varias formas:
- Mediante vómitos de comida poco digerida o sin digerir
- Presentando muchas arcadas
- Con diarreas a las 6-12 horas de comer
- Produciendo más saliva de la habitual (por lo que se lamerá el hocico de forma continua)
- Estando inquieto mientras busca la mejor postura
- Con molestias y dolor abdominal
- Con falta de apetito
- Y desganado (sin ganas de jugar y sin motivación)
Cómo actuar en caso de empacho en perros
Si tu perro tiene alguno de los síntomas anteriores, puede que esté sufriendo un empacho digestivo. No obstante, podrás estar 100% seguro si sus vómitos tienen comida sin digerir o muy poco digerida.
En todo caso, debes estar tranquilo porque esta indigestión no es algo grave a no ser que padezca una enfermedad o consecuencias derivadas de ello. Así que, se podrá recuperar rápido y sin problema.
Sin embargo, siempre podemos ayudarle para que no se encuentre mal tanto tiempo. A continuación te contamos qué hacer en caso de que padezca un empacho o indigestión.

1.- Mantenle en ayuno
No debes darle comida hasta 12 horas después de vomitar, ya que seguramente lo volvería a vomitar y tenemos que dejar reposar su estómago.
Pasado ese tiempo y si no vomita, es conviene ponerle 1/8 parte de su ración habitual e ir aumentando la dosis poco a poco hasta la cantidad normal al de 2-3 días. De esta forma, dejarás que el estómago vaya recuperando su funcionamiento y él vuelva a sentirse bien y feliz.

2.- Asegúrate de su hidratación
Con los vómitos y diarreas se pierde mucha agua que hay que recuperar, sin embargo, si le pones el cuenco lleno de agua y bebe mucha cantidad de golpe puede volver a vomitar. Lo ideal para rehidratarle es cambiarle el agua cada hora con cantidades moderadas de una toma.

Un truco para que beba despacio es ponerle un hielo para que lo chupe.
3.- Acude al veterinario en caso de tener síntomas 48 horas después de comer
Si continúa vomitando o hace heces con sangre acude al veterinario para descartar otros problemas y asegurarnos que no le sucede nada grave ya que las digestiones pesadas, el exceso de grasas y los grandes empachos por comida pueden producirle úlceras, inflamación del páncreas o pancreatitis o torsión de estómago.

Cómo evitar los empachos en perros
La mejor solución para evitar que tu amigo peludo sufra un empacho o indigestión es prevenirle de ella. ¿Cómo? Con varios consejos que te ofrecemos a continuación:
- Ofrécele una comida equilibrada y de calidad basada en nutrientes de origen natural ya que tendrá menos aditivos y será mucho más digestiva. De esta forma, su dieta será completa, saludable y libre de químicos.
- Dosifica las raciones de comida al día para que por un lado, no esté comiendo a todas horas, y por otro lado, no coma toda la comida a la vez.
- Elige un lugar tranquilo para que tu amigo peludo coma sin estrés ni competiciones con otras mascotas. Esto asegurará que coma tranquilo y sin prisas.
- No le des sobras de tu comida o cualquier otro alimento tóxico para él, ya que no le podría sentar bien y le podría provocar algún problema grave.
- Si tu perro es un glotón y come con ansiedad, es aconsejable que raciones su comida diariamente de manera que no coma todo de golpe. Existen comederos especiales adaptados para cada tipo de perruno. ¡Elige el mejor para él!
- Evita que realice ejercicio físico intenso antes y después de comer ya que podría ser una de las causas para sufra indigestiones u otras alteraciones digestivas graves como el síndrome de dilatación o torsión gástrica.