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¿Por qué se mueren las plantas de interior? Las causas más frecuentes


Sabemos que no todo el mundo tiene la misma mano con las plantas pero, muchas veces, el problema radica en que no tenemos en cuenta los aspectos más básicos.

A continuación, te contamos cuáles suelen ser las principales razones por la que acaban muriendo las plantas de interior.

Causas por las que se mueren las plantas de interior

Regar todas las plantas igual

Un inadecuado riego de las plantas es una de las causas más comunes por las que se mueren las plantas de interior. La frecuencia, la cantidad y la forma de riego varía completamente según las necesidades de cada una.

Las plantas de interior con flor, por ejemplo, requieren de un riego abundante, sobre todo, durante la época de floración y crecimiento, que suele durar desde primavera hasta verano. Otras, prefieren un riego escaso, lo que implica dejar secar la parte superior de la tierra (un tercio, más o menos) entre cada riego. Es importante conocer cuánta agua necesita cada una para no sobrepasarte y evitar que se produzcan pobredumbres.

regar violeta africana por inmersiónRegar violeta africana por inmersión

Las formas de hacerlo también pueden varíar. Por ejemplo, algunas plantas de interior que están en maceta se pueden regar desde arriba, colocando el agua en el plato o por inmersión. En otras hay que evitar a toda costa mojar las hojas o las flores ya acabarían marchitándose.

Otros factores determinantes son el clima, la ubicación y la hora del día. ¿Cuándo es el mejor momento para que riegues tus plantas? A primera hora de la mañana ya que todavía no se ha calentado el suelo, que es lo que propicia que el agua se evapore.

Las plantas de interior con hojas grandes necesitan también un mayor grado de humedad ambiental que el resto y, para ello, las pulverizaciones con agua son muy beneficiosas. Por si interesa, te contamos cómo aumentar la humedad ambiental.

plantas de interior y riegoCómo saber si tu planta tiene la humedad suficiente para crecer

El tipo de agua con el que se riega también afecta a la planta. Si acostumbras a hacerlo con agua dura, el suelo puede volverse alcalino, impidiendo así el correcto desarrollo de la variedad.

Los síntomas de un exceso de agua o de una escasez, a veces, pueden ser bastante similares. Esto suele confundir bastante a las personas y hacer que continuen regándolas hasta llegar a matarlas. En casos de duda, lo recomendable es aprovechar las novedades que están surgiendo en el mercado para identificar la humedad que tiene la maceta.

Falta de luz

Puede que te sorprenda la siguiente afirmación pero las plantas de interior no existen. La mayoría de ellas provienen de zonas tropicales de sotobosque en las que existe una carencia de luz. Esta es equiparable a la que podemos encontrar en el interior de los hogares y esa es la razón por la que se adaptan tan bien a estos entornos.

El factor de la luz es fundamental para que las plantas realicen la fotosíntesis. Les provee la energía para producir la materia orgánica para su crecimiento y desarrollo.

Dentro del conjunto de las plantas de interior, hay variedades que necesitan más luz y, otras, menos. Conocer su origen exacto te dará la información que necesitas para acertar y así evitar que acaben sucumbiendo.

La mayoría de las plantas de interior agradecen estar ubicadas en una zona de la casa con una buena luminosidad pero sin sol directo ya que, si no, podrían quemarse sus hojas. Otras, como ciertas suculentas, pueden estar expuestas sin problema a la luz directa. Por poner unos ejemplos: el espatifilo (Spathiphyllum Wallasii) exige bastante horas de luz para poder florecer y, la sanseviera es una planta que necesita poca luz para sobrevivir.

potos¿Cuánta luz necesitan las plantas?

¿Sabes que existe una relación directa entre la luz y el riego? Durante el invierno, como los días son más cortos y hay menos luz, los requerimientos de agua de nuestras plantas son mucho más bajos, ya que la actividad de estas también es mucho menor.

El problema se da cuando las variedades reciben una luz por debajo de un determinado umbral. En esos casos, si no se corrigen, acabarán muriendo. Algunos síntomas que denotan una insuficiencia de luz son: una menor floración, hojas más pequeñas y un menor crecimiento vegetativo.

Trasplante inadecuado

Cuando compres una nueva plantita, deberás transplantarla a un nuevo contenedor, sobre todo, si no tiene agujero de drenaje, ya que será mucho más complicado evitar futuros encharcamientos. Eso sí, deberá realizarse después de un periodo de aclimatización a sus nuevas condiciones.

Durante el tiempo que ha permanecido en el vivero, ha estado expuesta a ciertos niveles de luz y temperatura. Este tiempo de espera ayudará a evitar el conocido shock por trasplante.

Cuando la trasplantes, procurara no eliminar el sustrato que está adherido a las raíces porque, de lo contrario, además de eliminar los hongos micorrízicos, eliminarás sin querer las raíces conductoras y funcionales que son extremadamente finas y frágiles.

trasplantar planta¿Cómo saber cuándo debemos trasplantar una planta?

Tampoco escatimes nunca en utilizar un buen sustrato ya que, si usas uno de mala calidad, puede provocar bloqueo y estrés en el desarrollo de la planta.

Si tienes una planta durante muchos años en el mismo contenedor, probablemente, detenga su crecimiento. ¿Por qué? Las raíces son el cerebro de las plantas y para mantenerlas sanas, necesitan tener espacio suficiente para crecer y desarrollarse.

Hay variedades como los Rhipsalis que, debido a su tipo de crecimiento, pueden permanecer mucho tiempo en el mismo mismo contenedor. Otras, en cambio, no. Deberás identifica siempre cuáles son las necesidades concretas de tu planta.

Otro factor que influye en el exito del trasplante es la época a realizarlo. No suele ser recomendable hacerlo en los meses más cálidos ya que demandará muchos más riegos. El mejor momento para los trasplantes suele ser a la salida del invierno, cuando la planta se activa. Y si, además, le añades tierra nueva, será el plus de energía que la planta necesitará para desarrollarse mejor.

Temperatura excesiva

La temperatura de las casas suele ser bastante similar al origen de las plantas de interior, las selvas tropicales (entre 18ºC y 28ºC): inviernos templados y veranos no excesivamente cálidos.

calefacción y plantas¿Cómo afecta la calefacción a las plantas de interior?

Seguramente hayas escuchado que la calefacción afecta al estado de tus plantas de interior pero, en realidad, se trata de un mito. La calefacción en el interior de nuestros hogares nunca suele (o no debería) ser superior a los 25ºC, por lo que las plantas están en un rango de temperatura perfecto.

Solamente, en el caso de estar muy, pero que muy cerca del punto de calor -bien sea radiador, estufa o aparato de aire caliente- la elevada temperatura en este punto puede ser un problema. En ese caso, habría que alejar la planta de ese punto ya que podría afectarla severamente.

Plagas y enfermedades

Las plantas de interior suelen están protegidas de muchas de las plagas del mundo exterior. De hecho, la mayoría de ellas suelen entrar al incorporar nuevas variedades al hogar.

cochinilla en nolinaCochinilla algodonosa: cómo detectarla y actuar en caso de plaga

La clave para su mantenimiento es la observación. Ante cualquier síntoma de plaga u enfermedad en una de ellas, hay que actuar para evitar la proliferación por el resto de plantas de interior. Si no se actúa a tiempo, puede causar la muerte de muchas.

Algunas de las plagas más comunes son la cochinilla, la mosca blanca, el moho gris...

Moverlas continuamente

Puede parecer algo sin importancia, pero moverlas continuamente les afecta negativamente. Como hemos adelantado en el punto del trasplante, adaptarse a las condiciones de un sitio exige un esfuerzo por parte de la planta.

Moverlas continuamente

Solo se recomienda moverlas si notas que no están recibiendo suficiente luz o si están en una zona con constantes corrientes de aire. Lo que sí es aconsejable es ir girándolas para promover un crecimiento homogéneo en toda la planta y evitar que sucumba hacía la zona de la luz.