Tipos de pan y sus diferencias, por harinas, métodos y sabores
Entre masas
De la masa madre al pan de cereales: los tipos de pan más populares y sus diferencias

El pan es uno de los alimentos más antiguos del mundo, pero también uno de los más versátiles. Hoy ya no hablamos solo del pan 'normal': hay panes integrales, con cereales, sin gluten, de leche o incluso aromatizados con ajo.
Podemos clasificarlos según su harina, su método de elaboración o su sabor, y cada uno ofrece una textura, aroma y uso diferente. En este artículo repasamos los más populares para que encuentres tu pan perfecto.
Tipos de pan según la harina
La base del pan siempre es la misma: harina, agua, levadura y sal. Pero el tipo de cereal que se utilice cambia por completo el resultado. El sabor, la textura y el valor nutricional dependen, sobre todo, de la harina elegida.
Pan de trigo
Es el más común y versátil. Su contenido en gluten permite una masa elástica y una miga esponjosa. Se usa para hogazas, baguettes, chapatas o panes de molde. Ideal para todo tipo de usos: bocadillos, tostadas y acompañar comidas.
Pan de centeno
Tiene un color más oscuro, aroma profundo y sabor ligeramente ácido.
Contiene menos gluten que el trigo, por lo que resulta más compacto y saciante.
Es típico del norte de Europa y combina muy bien con quesos curados o productos ahumados. En países como Finlandia, el ruisleipä es un pan de centeno tradicional que forma parte de su identidad gastronómica.

Pan de espelta
Variedad antigua de trigo más digestiva y con sabor suave y ligeramente dulce. Rico en fibra, proteínas y minerales, se ha popularizado como alternativa saludable al pan blanco.
Pan de avena
Aporta una miga tierna y un sabor delicado con un punto dulce. Ideal para desayunos y dietas equilibradas. La avena ayuda a reducir el colesterol y aporta energía de liberación lenta.
Pan de maíz
De color dorado y textura densa, no contiene gluten. Es típico en Galicia (broa de millo) y América (cornbread). Su sabor ligeramente dulce combina muy bien con guisos o platos con salsa.
Pan de trigo sarraceno
Aunque su nombre confunde, no es trigo y no contiene gluten. Tiene un sabor terroso y distintivo, y es rico en proteínas vegetales y minerales. Muy utilizado en dietas sin gluten o mezclado con otras harinas.
Pan de cereales e integral
El pan de cereales combina varias harinas -trigo, centeno, espelta, avena, mijo- y suele incorporar semillas.

El pan integral, en cambio, utiliza harina sin refinar, con todo el salvado del grano.
Ambos son más nutritivos, ricos en fibra y saciantes.
Tipos de pan según el método de elaboración
Más allá de la harina, el proceso de fermentación y amasado define el carácter de cada pan. No es lo mismo un pan rápido con levadura que uno de masa madre fermentado lentamente.
Pan de masa madre
Se elabora con una mezcla natural de harina y agua fermentada con levaduras y bacterias. Su sabor es ligeramente ácido, con corteza crujiente y miga húmeda.
Además, es más digestivo y se conserva mejor sin necesidad de conservantes. Ideal para quienes disfrutan del pan artesanal con personalidad propia.
Pan sin amasado
Perfecto para principiantes. Solo requiere mezclar los ingredientes y dejar fermentar durante horas.
La fermentación lenta hace el trabajo del amasado y consigue una textura aireada sin esfuerzo.
Pan de leche
Un pan enriquecido con leche, mantequilla y azúcar. De miga tierna y sabor suave, resulta perfecto para desayunos y meriendas.
Si te apetece probar una versión diferente y muy vistosa, te encantará esta receta de rosas de pan de leche, ideal para compartir en familia o sorprender en una merienda especial.

Pan de molde
De miga tierna y textura uniforme, se hornea dentro de un molde. El pan de molde es ideal para sándwiches y tostadas.
Puede llevar leche o mantequilla, lo que prolonga su frescura.
Tipos de pan según el sabor o los ingredientes aromáticos
Algunos panes se distinguen no tanto por la harina, sino por los ingredientes que se incorporan a la masa: ajo, hierbas, frutos secos o aceitunas.
Pan de ajo
Aromático y sabroso, se prepara con mantequilla o aceite infusionado con ajo. Perfecto para acompañar pastas, carnes o servir como aperitivo.
Si quieres probarlo en casa, te enseñamos cómo hacer pan de ajo paso a paso con una receta sencilla y deliciosa de Eva Arguiñano.
Panes aromatizados
Los panes con ingredientes añadidos -como especias, frutas secas o verduras- se han vuelto cada vez más populares. Aportan matices, color y un toque gourmet sin complicaciones.
Entre los más originales puedes probar:
- El pan de cúrcuma y amapola, con un color vibrante y aroma especiado,
- El pan con higos secos, ideal para combinar con quesos o foie,
- El pan marmolado, tan vistoso como delicioso,
- El pan de muesli, perfecto para desayunos energéticos,
- El pan de remolacha, de color intenso y sabor suave,
- El pan de nueces, uno de los favoritos para acompañar quesos y embutidos,
- El pan de curry, con un toque exótico y ligeramente picante que sorprende en cada bocado.
Consejo: anímate a combinar harinas y añadir tus propios ingredientes: semillas, hierbas aromáticas o frutas deshidratadas. Así conseguirás un pan único y lleno de sabor.

Pan sin gluten: una alternativa para todos
La panadería sin gluten ha avanzado mucho en los últimos años.
Hoy se pueden elaborar panes deliciosos con harinas de maíz, arroz, trigo sarraceno o legumbres.
Su textura mejora al combinar diferentes harinas y añadir espesantes naturales como el psyllium o la goma xantana.
Si te interesa aprender a prepararlo en casa paso a paso, puedes seguir esta receta de pan sin gluten para celíacos, perfecta para disfrutar de un pan tierno y sabroso sin renunciar al sabor.
Otros panes que puedes probar
El mundo del pan es tan amplio que siempre queda algo nuevo por descubrir. Más allá de los clásicos, existen panes con historias propias, texturas sorprendentes y sabores que invitan a viajar sin salir de casa.
El pan de cristal, por ejemplo, es toda una joya de la panadería moderna: su corteza finísima encierra una miga ligera y llena de aire, perfecta para preparar tostas crujientes.
El pan Fabiola, en cambio, representa la sencillez de la tradición, con una miga suave y delicada que recuerda al pan de pueblo recién hecho.
Y si te apetece viajar un poco más lejos, el pan de pita te llevará directo al Mediterráneo: fino, flexible y perfecto para rellenar con verduras, carne o hummus.

Hoy en día, con el auge de las dietas low carb y las tendencias que limitan el consumo de harinas, el pan ha pasado a un segundo plano en muchas mesas. Sin embargo, pocos alimentos despiertan una emoción tan sencilla y universal como un pan recién hecho.
El olor que sale del horno, la corteza que cruje al partirlo o la miga todavía tibia siguen siendo pequeños placeres que nos conectan con lo más básico de la cocina: el tiempo, el cuidado y el gusto por compartir.
Porque hacer pan -o simplemente elegirlo bien- es, en el fondo, una forma de reconciliarse con el tiempo, de sentarse a la mesa sin prisas y de disfrutar ese último trozo que se moja en la salsa.